BÚSCAME [Parte 1 Y Parte 2]

XXV-Final

Estoy apollada en la puerta la casa de Jul quien esta a mi lado y no deja repetir esas malditas palabras que tanto odio.

"Todo estará bien"

Nada, nada estará jodidamente bien.

-En cuanto Marcos llame o mande a alguien por nosotras aclararemos todo esto.

No le respondo, simplemente la ignoro.

No quiero, no quiero estar aquí y no quiero saber nada de toda esta mierda.

-Llamé a Blake-le digo mientras la miro de reojo-Me voy a ir por un tiempo July.

Ella se congela con la mirada perdida.

-No, no Jorja piensa bien las cosas.

-Lo hice-cepillo mis dientes con mi lengua-Y la decisión está tomada.

Me levando con dificultad incorporandome ya que a lo lejos de la calle logro oír el auto del pelinegro.

Antes de salir de su casa y marcharme me giro hacia July. La voy a extrañar, no les voy a mentir, ella prácticamente fue mi madre y se que sin decírselo lo sabe.

Me acerco a ella y la abrazo fuertemente, se que está aguantando las ganas de llorar al igual que yo. Es lo único bueno que tengo en mi vida aparte de....

-Cuídate mucho-dice con su voz entrecortada-No hagas nada que yo no haría-ríe con nostalgia.

-No te prometo nada-me separo un poco para verle el rostro-Acuérdate quien soy.

Me regala una mirada cálida y limpia un par de lágrimas.

-Una última cosa Jul-me giro ya con la puerta abierta-Si en dado caso que...-trago con dificultad-Ya sabes-hago un ademan-No le digas absolutamente nada yo te contactaré a ti cada que pueda.

Ella asiente no muy de acuerdo y sin más subo al carro y Blake pone marcha.

Ninguno de los dos articula palabra alguna, sabe que no me gusta expresar lo que siento o lo que pienso cuando estoy en estas condiciones. El hecho de ser tan cerrada con las personas no suele ayudar ya que te toca luchar contra todo lo que te está consumiendo tu mismo y a eso sumale el echo de que no sabes quien ganará esa batalla, si tú o el deseo de acabar con todo.

Estaba tan absorta en mi pensamiento que se me había olvidado decirle a Blake a donde iremos.

-Blake antes de salir de la ciudad necesito que me lleves a mi vieja casa- antes de cruzar me echa un breve vistazo que le es suficiente para ver lo deprodable que estaba.

Así que frenó de golpe.

-¡Pedazo de animal!-le ladro-¡Se me revolvió hasta el cerebro!

El no deja de mirarme con su semblante de preocupación. Sé que no estoy en las mejores condiciones pero no es para tanto.

-Jorja iremos a que te curen esa herida-veo las intercepciones y me percato que estamos cerca de los hospitales.

No, no, no

Al maldito hospital no.

Antes que de marcha a su auto nuevamente hago un movimiento rápido quitando las llaves.

-No, al hospital no-me empiezo a imperventilar y la falta de aire se empieza a notar-No quiero ir a ese lugar.

El hecho de que probablemente Melak este en alguna de ellos, yo no...yo no podría...

Me llevo la mano al pecho tratando de controlarme. Aprieto los ojos con fuerza y empiezo a contar de dos en dos hasta llegar a trescientos.

Odio la manera en la que Melak logró influir en mí.