El legado de la Venganza

Capítulo 52

Narra Catalina

Me despido de las chicas por última vez antes de estar juntas para siempre

—vamos no seas tan mimada regresaré pronto – Elizabeth niega aferrándose a mi – ya no tienes cinco años – recuerdo

—Quiero ir contigo – niego

—Dijiste que te quedarías con Catalella – recuerdo

—Pero también quiero ir contigo – niego

—ayuda a tu hermana mayor con las otras recuerda que eres la segunda hermana y debes ayudar a la mayor - - recuerdo

—bien pero volverás lo antes posible – asiento

—Solo le daré una visita al duque y regresaré con todas ustedes – al final Elizabeth me suelta

—esta bien pero me traes algo – asiento

—lo que quieras

Después de otra larga despedida al fin abordó el avión, cierro mis ojos mientras me recuesto en el asiento

Debo admitir que ayer todo fue un verdadero caos, las miradas asesinas y de sorpresa de las personas fue lo que más llamó mi atención creo que mi prima está tomando muy malas decisiones solo por hacer feliz a mi tía, tener tantos enemigos nunca es bueno, ella se esta dejando llevar por los sentimientos de agradecimiento que tiene y no esta pensando bien por esa razón iré a visitar al duque, el es la única persona que puede hacer que Catalella entre en razón y deje esta venganza de lado

Abro mis ojos al escuchar el movimiento a un lado mío y para mi sorpresa hay un par de ojos bicolor mirándome con gracia

—¿sabías que eres más linda cuando estás tranquila? – Frunzo el ceño - ¿realmente pensabas que te iba a dejar ir?

—¿qué demonios haces en mi avión? – pregunto

—no puedo permitir que mi mujer se valla a ver con su ex – coloca la mano en la barbilla - ¿qué crees tú? – tomo mi bolso dispuesta a sacar mi pistola pero el rápidamente me lo quita – no hagamos esto más difícil

—Mario es mejor que me dejes ir – advierto – de lo contrario yo misma de ejecutare

—inténtalo – reta – creo que es muy tarde para notificarle que su avión a sido secuestrado

—Eres un maldito engendro – aprovechó que tiene las defensas bajas y lo golpeo con mi pie haciendo que retroceda, me levanto y salgo corriendo a la parte trasera del avión

Dos hombres aparecen delante de mi y en este momento maldito el no aprender defensa propia y solo a manejar armas, retroceso ya que ambos son mucho más grande de tamaño y musculatura

Choco con seguramente Mario haciendo que trague saliva ¿es normal temerle a un niño tres años menor que tu? Volteo enfrentándome a esa mirada llena de ira

—siéntate  - ordena

Hago lo que me pide y el se sienta delante de mi, coloca su mano en su cuenta dándole pequeños masajes