🍥🌸 20 🌸🍥

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⌜ㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤ⌝
Tienes la oportunidad de
ser lo que sueñas.
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—No... —dejó salir de sus labios buscando por todas partes una cabellera rosa.

Intentó localizar su chakra todavía ahí, parado, con su hijo mirando a su alrededor con un nudo en su garganta. Con las lágrimas asomándose usó su modo sabio y a unos cuántos kilómetros pudo rastrearla bajo trozos de madera y tierra.

El chakra de Sakura apenas era palpable, si estaba a punto de morir tenía algo de tiempo para rescatarla y socorrerla, corrió como nunca hasta el punto indicado y sin importarle nada fue sacando todo aquello que cubría a Sakura, ensuciándose en el proceso.

Cuando la encontró, estaba llena de tierra y pequeños rasguños, se deshizo de toda la estorbosa madera y tierra que le impedía sacarla, al tenerla en sus brazos la zarandeó un poco, con su mano libre limpió todos los restos de tierra y le palmeó las mejillas.

—S-Sakura-chan... —su respiración se volvió muy pesada —O-oye, despierta... —jadeó con sus labios temblando.

Las lágrimas no tardaron en abandonar sus ojos, esto era lo que siempre quiso evitar: perderla a ella también. Con su pésimo conocimiento en el área de los primeros auxilios, le proporcionó respiración de boca a boca y también presionó su pecho varias veces, pero nada.

—Papá... —el pequeño Arashi no podía asimilar lo que pasaba, pero estaba seguro de que su madre ya no estaba en este mundo, en la mente de un niño siempre son esas cosas las que pasan primero.

—No me dejes tú también... —le pidió abrazando su cuerpo, con sus lágrimas cayendo en el nívea rostro de su esposa.

El pelirrojo se acercó a ver a su madre y le tomó la mano, la sentía fría. La culpa se apoderó de él porque tal vez si hubiese sido un buen niño y se hubiera ido con los demás esto no habría pasado, él sentía que había matado a su mamá, las lágrimas de Arashi también corrieron por su rostro y se alejó un poco de ambos adultos por la vergüenza que sentía, si su hermano mayor estuviera presente, sabría qué hacer. Shinachiku es más de pensar mientras que el resto de la familia es más emocional.

—¿A quién le lloras, cabeza hueca...? —se escuchó una voz débil.

Naruto levantó la vista hacia esa voz, se trataba de su esposa que había despertado, ella todavía estaba débil y miraba a su esposo con mucho amor, siendo estrujada por él en sus brazos.

—Tuve tanto miedo de perderte... —le susurró juntando sus frentes.

—Lamento asustarte... —cerró los ojos tomando un breve descanso —No podía dejarte peleando solo. Ahora sí podremos vivir en paz...

—¡Mami! —Arashi volvió con ellos al ver que su mamá respiraba —¡Lo siento! —sollozó —¡Debí irme con el tío Shikamaru, pero no quise hacerlo! —lloriqueó yendo a abrazar a su madre —No quería que él te llevara...

La pelirrosa sonrió leve ante las confesiones de su hijo, solo le dejó un beso en la frente y una caricia que alivió su llanto.

—Lo importante es que todos estamos bien, vámonos a casa.

Naruto la cargó en brazos y empezó a caminar hacia Konoha con su hijo a un lado, en el camino Sakura le contó todo lo sucedido con Noroi antes de que se volviera polvo, después de un tiempo caminando Naruto recordó que podía teletransportarse a casa y fue cuando finalmente regresaron a Konoha. Lo primero que hicieron fue ir al hospital donde Sakura quería comprobar el estado de sus hijos, de paso Ino terminó de curar las heridas que ella misma había pasado por desapercibida.

Lo Que Siempre Soñamos Ser... [NaruSaku] ✔Donde viven las historias. Descúbrelo ahora