GiyuuSane Oneshot's

Sacrificio.

Imagínate un mundo donde se pudiera dar la vida de una persona por otra.
Au donde Sabito muere en una misión y Sanemi decide hacer algo para alegrar a Giyuu aunque eso le cueste.
***

Sanemi observó a Giyuu, el chico se encontraba echado en el futon que a veces compartían, sus lagrimas recorrían todo su rostro hace apenas unas semanas sabito habia fallecido a costa de una misión, cosa que destrozó a Giyuu, el cual ya no se dignaba ni a mirar a su novio y muchas veces discutían.

—Me voy...— Sanemi se levantó para ir por su katana e irse, el azabache solo lo miro de reojo suspirando, mientras que rezaba porque el albino volviera bien después de su misión. Aunque no pareciese Giyuu si se echaría a morir si algo le pasaría a Sanemi, era un miedo constante.

Por otro lado Sanemi fue llevado a la sede, donde se encontró con el resto de pilares observando un mapa. Los ojos se los pilares brillaban mientras que señalaban partes del mapa así que decidió acercárseles.

—¡Sanemi! Por fin llegas, les cuento el plan— la voz de Kyojuro resonó mientras que se paraba al frente de los 6 pilares restantes, ya que uzui se había retirado luego de la pelea con la luna superior 6, Giyuu no estaba y sabito estaba muerto— Shinobu y yo encontramos un mapa que nos lleva hacia el dios de la luna, con eso podemos revivir a sabito, nos dividiremos por parejas pero como sabemos que a Sanemi le gusta ir solo el irá solo pero claro con el amuleto.

—¿Revivir a un muerto? Están seguros de esto— la inseguridad de Sanemi se hizo presente mientras que agarraba el amuleto entre sus manos.

—¡Necesitamos a Sabito! El es de los más fuertes y sin sabito, tomioka no se va a mover el es muy importante para el, incluso es la persona más importante para el— hablo esta vez Shinobu, el de serpientes chasqueó la lengua sintiendo el malestar de Sanemi ante esas palabras.

—Bueno tienen razón.

Finalmente a cada uno se le dio un mapa, y se separaron por equipos los cuales consistían en: Kyojuro y Shinobu, Himejima y Tokito, Mitsuri y Obanai, y por último Sanemi.

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El albino iba solo, alerta por el bosque su espada iba en su mano por si algo lo atacaba, cada vez sentía el aroma a flores más cercano cosa que lo empezó a sofocar. Dio un paso en falso y cayó por un hueco, golpeándose fuertemente la cabeza, finalmente quedando inconsciente.

"Ambos chicos miraban a la luna agarrados de la mano, cuando Sanemi volvió de una misión totalmente herido Giyuu había llegado a la enfermería gritando donde estaba hasta que finalmente se quedó cuidándolo en su recuperación.

—Me haces muy feliz Sanemi, no me gustaría perderte— el azabache observó los ojos del albino, podía notar como ambos ojos azules profundos se cristalizaban—moriria si algo te pasara.

—Te prometo hacerte feliz y nada me va a pasar— el albino se abrazo a la cintura del azabache escondiendo su rostro en el pecho del contrario dejando que solo se escuchara los latidos de ambos."

El albino abrió sus ojos finalmente notando una extraña presencia frente suyo, sus ojos eran de un color azul brillante pero no tenía ningún kanji escrito por lo que descartó que era alguna luna.

—¡oh! Si despertaste muchos no despiertan— la voz tenía mucho eco pero era suave, pudo notar la piel pálida del contrario hasta que sintió como lo agarraba de la muñeca para sentarlo— dime viajero que vienes a buscar.

—¿quien eres? Espera ¿que es esto...?— Sanemi pudo notar lirios araña rojos en el lugar cosa que lo aterró— mi espada donde esta.

—¿uh? No se creo que se quedó arriba— el contrario se rió un poco al notarlo tan alerta— tú venías a buscarme, lo sé, vi el mapa, soy lo que revivirá a sabito, mucho gusto soy el guardián de los lirios araña la famosa leyenda de los lirios araña rojos y azules que buscan tanto.