Capítulo 29

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-Mamá- escucho una suave voz a lo lejos -Mamá, despierta- ¿esa es la voz de un niño? -Hey, ¿qué haces?, deja dormir un rato más a mamá- es Laura... -Pero mami, mamá ayer dijo que jugaría conmigo temprano en la playa- la voz de la pequeña parece apagarse, lentamente abro los ojos, casi encima mío está una pequeña rubia con ojos verdes, wow, su cabello es bastante rizado, ¿es mi hija? -¡Mamá!- la pequeña se avalanza sobre mi, confirmando que es mi hija, mis ojos se llenan de lágrimas, es preciosa, Laura nos ve de lejos con una gran sonrisa, se acerca y besa mis labios gustosa -Buen día cariño- dice suave, mientras acaricia el cabello de la pequeña -Ven Marie, deja que mamá se duche- se separa de mi y toma a Laura de la mano -Okey mami- le dice con su suave voz a Laura, sonrió al entender la situación y así como vuelvo a acostarme de repente despierto, viendo todo aun en tonalidad gris, siento lágrimas que caen por mis mejillas, mierda, ¿cuando acabarán los sueños con Laura?, parece que mi mente no la a olvidado ni un poco.

-Lo estoy Laura- digo mostrándole la muestra que esta en mis manos temblorosas, Laura comienza a llorar mientras me abraza, se escucha su risa inundar el baño, es mi sonido favorito, y estar entre sus brazos después de enterarnos que seremos mamás es lo más bonito que e sentido en toda mi vida, pero, despierto, sintiendo el silencio apoderarse de mi, de un segundo a otro la habitación que era hindundada por su risa pasa a ser una habitación llena de silencio, si el silencio no es nada ¿como puede llenar algo?, si la triztesa solo es un sentimiento ¿como siento su peso en mi espalda?, supongo que el amor es más sencillo, así como floreció, se marchito.

Me levanto de mi cama, aún con sueño, e estado batallando para dormir y cuando lo logro solo sueño con ella, su rostro, sus ojos verdes, aún recuerdo su tacto a pesar de llevar dos meses sin sentirlo, destapó mi cuerpo, sintiendo un terrible frío, ¿acaso ya empezó el invierno?, ni siquiera se en que mes estoy viviendo, un escalofrío recorre mi cuerpo cuando mis pies tocan el frío suelo, me levanto y me acerco a mis cortinas negras, lentamente, sin que se abran, paso mi mano para tocar la ventana, su temperatura es normal, extrañada toco mi frente, sintiendo el calor, estoy resfriada -Lo que faltaba, tener un puto resfrío- murmuró caminando hacia la cocina, abro unos cajones sacando de ahí medicamento para no tener tanto malestar, lo paso y me siento en el sofá de la sala, viendo al rededor, todo es tan vacío, sin amigos, sin pareja, a veces odio que Dan haya conocido a Morten, pero, si están destinados, tenían que conocerse y vivir su vida juntos, crear su propia vida, supongo que quien debió apartarse de eso sí debí haber sido yo, mi celular vibra, sacándome del trance del cual suelo estar sumergida todos los días, cansada lo veo, es un mensaje de whatsapp, curiosa comienzo a leer, "Alex!, que tal, ayer fue el debut de un nuevo cantante, el cual está interesado en que le tomes fotografías y me pidió invitarte a una pequeña fiesta aquí en su casa, aquí esta la dirección!, espero puedas venir y distraer un poco esa curiosa mente que tienes, ¡te extrañamos!- es Jin, ni siquiera lo recordaba, es fotógrafo también, siempre fue muy amable conmigo, intentado sacarme platica, pero parece que yo siempre estuve sumergida en el mundo de Laura, sonrió al saber que siempre tienes a alguien, parece que Jin supo que estaba pasandola mal y el destino lo trajo a mi, además que ser el primer fotógrafo de un artista recién debutado es una grandiosa oportunidad, si les gusta tu trabajo, no piensan en el trabajo de alguien mas, hay que ir, ¿pero si el ambiente es incomodo?, ¿si me aburro?, al diablo con eso, al diablo todo, incluyendo a Laura.

Volteo a verme al espejo una y otra vez, mi cabello mojado cae por mi cara, ya esta mas largo, no lo había notado, incluso tapa mis orejas, estoy un poco más delgada, veo mis clavículas más marcadas ahora, tocó mi cuerpo por encima del vestido negro, la tela gruesa se siente muy suave, es un vestido corto y muy pegado, pero raramente cómodo, me maquillo un poco, haciendo un fino delineado en ambos ojos, viendo los bonitos ojos levemente rasgados que adornan mi cara, viendo las tres perforaciones que decoran mis cejas, así como en el labio de abajo de mi boca, las dos piezas de cada lado brillan debido a la poca iluminación, me gustan bastante, toco mi rostro, dandome cuenta de los rasgos adultos, salgo de mi trance, poniéndome labial guinda mate en los labios, sintiendo que ya estoy lista, tomo el pequeño bolso, solo metiendo cigarros y mis llaves, lista salgo de la casa, viendo lo vacía y triste que se ve antes de cerrar la puerta.

Perfecta © (LP) (LAURA PERGOLIZZI)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora