• Capítulo 7 •

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Cerca de 10 minutos después nos encontrábamos en el hospital

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Cerca de 10 minutos después nos encontrábamos en el hospital. Baji había ido a conversar con Mikey mientras yo acompañaba a Emma.

-Tranquila...- Acariciaba su espalda en forma de cariño. -No es primera vez que pasa y lo sabes.

-Estaban muy molestos.- Sollozaba en mis piernas. -Mikey quería sacar a Pahchin pero Draken se opuso por respetar su decisión.

-Lo sé.- Besé su cabeza. -Ya verás cómo todo se soluciona.

Supimos por Draken lo que había pasado. Moebius había aparecido inesperadamente en el galpón donde se encontraba parte de la pandilla. Tras algunos golpes entre Pah y Osanai se desataron las patadas de Mikey. Finalmente el octavo líder fue apuñalado por la espalda en un arrebato de ira sufrido por Pahchin.

Decidió entregarse a la policía y ahí la razón de la disputa entre Mikey y Draken.

Estábamos en el hospital esperando noticias de Takemichi, Hina estaba con él. Se había desmayado en medio del arranque policial y cómo no. Estaba todo maltratado el pobre.

-¿Quieres ir a casa?- Pregunté suavemente. Me dolía mucho verla en ese estado por culpa de los otros dos.

-¿Crees que Hina estará bien?- Levantó lentamente su cabeza de mis piernas.

-Claro que sí, Takemichi ya despertó.- Me puse de pie y le ofrecí una mano. -Vámonos. Yo pido un taxi.

En el trayecto, decidimos ir a mi casa. Así Emma podría relajarse sin dar mayor explicación en su hogar.

Al llegar, le preparé un té y la envolví en una mantita. Sabía cuánto le afectaban esta clases de cosas. Draken era tan importante para ella como lo era Mikey.

-¿Estás más tranquila?- Asintió con un bostezo. -Ve a mi habitación y duerme. Les avisaré a los demás que estás aquí para que no se preocupen.

-Gracias _____.- Me miró a los ojos y sonrió de manera sincera. -Me alegra que Baji-San tenga a alguien como tú.

-Vamos, no digas estupideces.- Le di un leve empujón y se puso de pie en dirección a la escalera. -Buenas noches.

-Buenas noches _____.- Parecía un pingüinito desde mi perspectiva con la labra en su espalda moviéndose al son de sus caderas.

Negué riendo y tomé mi celular para enviar un mensaje.

Emma está en mi casa,
pasará la noche aquí.

Me di un golpe mental al darme cuenta que le envié el mensaje a Draken pensando que le diría a Mikey, pero... Tercera guerra mundial pasa.

Copié y pegué el mismo mensaje en el chat del otro Sano y me encerré en mi estudio a trabajar en el diseño de un cliente para el día siguiente.

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𝐈𝐍𝐌𝐀𝐑𝐂𝐄𝐒𝐈𝐁𝐋𝐄 | Baji Keisuke ✓ Donde viven las historias. Descúbrelo ahora