Escribir o morir

21. Tocadiscos

Harry Potter x Ron Weasley 

Era el quinto aniversario de Ron con su novio, aún no podía creer que después de tantos años el pelinegro le hubiera hecho caso, aunque al principio no se habían llevado bien, al ser Ron de Gryffindor y Harry de Slytherin tuvieron que dejar muchos prejuicios de lado.

Cuando recién se conocieron el pelirrojo hablo mal de la familia de Draco y Harry no le había gustado eso, puesto que Draco había sido el primer niño con magia que conoció, ambos habían platicado unos días antes de reencontrarse en el andén 9 3/4 y se hicieron amigos inmediatamente.

Conforme se conocían, Ron se mostraba celoso ante las actitudes amistosas de los gryffindor, pero en el momento en que Draco empezó una relación poliamorosa con los gemelos, fue ahí que le pidió ayuda a su antes contrario, actual cuñado, para poder conquistar al pelinegro.

24 citas, 13 desayunos junto al lago, 2 cajas de chocolates y 1 beso fueron los pasos que tuvo que completar para convertirse en el novio de Harry, días después del acontecimiento hicieron una cena con toda la familia para hacer formal el noviazgo.

Por un lado los padres de Harry, Jamás Potter y Sirius Black lo habían tomado muy bien estaban contentos de que su hijo hubiera encontrado alguien que lo amara por quién era, tal como lo hacía Ron.

Ahora el problema que se presentaba ante los ojos del pelirrojo, era que no sabía que regalarle por su aniversario, había tratado de pensar en todo, su primera opción había sido una escoba, pero Harry no lo necesitaba, su equipo de quidditch le daba un par para los entrenamientos y otra especial para cada juego, también pensó en una colección de libros de artes oscuras, o calderos para sus pociones por diversión, pero nada lo convencía del todo. debía de ser algo especial.

Debía ser algo especial a lo que Harry no tuviera acceso fácilmente, como un artefacto muggle, a Harry le parecía muy interesante la manera en la que las personas sin magia se adaptaban a las situaciones, creaban y diseñaba objetos, fué ahí en donde la idea se le vino a la mente, Harry amaba la música y qué mejor que un artefacto para poder escucharla en el momento en el que lo deseara.

Al día siguiente le mandó una lechuza a Dean para poder reunirse con él y que le hablara sobre aquellos artefactos de apariencia extraña para utilizaba su familia para escuchar música, el castaño le dijo que no había ningún problema en verse, que de hecho tenía varias ideas de lo que le pudiera servir como regalo, lo que pensaba que le podía gustar al de ojos negros definitivamente sería un tocadiscos.

Específicamente un Byron Statics Reproductor de discos de vinilo, en un precioso color azul, era una joya, sin duda algo que cualquiera desearía tener.

El hecho de que Harry se la pasara hablando de The Beatles y Oasis, hacía que Ron se sintiera cómodo con la decisión que había tomado, confiaba que a su pareja le gustaría poder disfrutar de la música junto a una copa de vino.

A solo dos días de su aniversario, y muchos galeones gastados, Ron pensó que el trabajo estaba hecho, el regalo de aniversario estaba aprobado por Draco, Dean, Neville, Pansy y Theo, tenía que funcionar.

Pansy le había hecho el favor de prestarle su nuevo restaurante junto con un poco de personal para que tuvieran una cena sin que las personas los estuvieran observando todo el tiempo. Harry nunca había sido muy fanático de la gente o las multitudes por lo que una cena privada en "Draconis pour toujours", en honor a su amistad con el rubio, era un buen plan, pido que preparan comida francesa puesto que con todos los viajes con los Malfoy, Harry se había enamorado de aquella comida.

-Hola rojito ¿Cómo estás?- llegó saludó y con un beso, un poco sorprendido de que no hubiera nadie en el lugar -¿Y toda la gente?, no pensé que en tan poco tiempo la gente hubiera dejado de asistir al restaurante más popular de los últimos 8 meses-

-De hecho Parkinson me hizo el favor de cerrarlo el día de hoy para que fuera solo para nosotros, no todos lo días se cumplen 5 años de noviazgo-

Una sonrisita tonta se apareció en los labios del moreno un poco avergonzado, por lo que había dicho su pareja, puesto que aunque fuera verdad, había cosas que lo ponían un poco nervioso, se sentaron a comer y empezaron a degustar de "La quiche Lorraine", el plato favorito de Harry, según Ron era un platillo rico, pero nada era más delicioso que un pollo frito, pero para ocasiones especiales, debían ser platillos especiales.

Empezaron a platicar de lo que les había pasado en la semana, ya que con su horario del ministerio y los entrenamientos de sol a sol de Potter, no habían tenido mucho tiempo para poder conversar, al ser Ron miembro del cuerpo de los inflables, no había mucho que pudiera compartir con su pareja, pero aún así se dedicó a escuchar a su novio sobre lo molesto que había sido dejar pasara la snitch un par de veces en la simulación del partido para que su reemplazo pudiera practicar también.

Cuando llegó a darle su tan esperado tocadiscos a Harry, Ron empezó a ponerse un poco nervioso, ¿Qué pasaba si a Harry, no le gustaba el aparato, o si prefería el color verde sobre el azul, o prefería AC DC, sobre Oasis, los nervios aumentaron un poco más, cuando de su bolsillo Harry sacó un pergamino, y un sobre.

Le pido a Harry, que lo dejara entregar primero el regalo, y cuando el de ojos verdes, quitó la tapadera de la caja, sus ojos se cristalizaron un poco, por la emoción que le produjo recibir su reproductor de música, -Merlín Ron es perfecto, justo hace días que había platicado con Dean sobre esto, me encanta- se acercó y posicionó una mano sobre la nuca de este para acercarlo a él y juntar sus labios en un beso.

-¿Él color está bien?, creo que si hablo con el vendedor...

-Ron el color es perfecto, el azul es mi color favorito.

-¿Seguro?, la podemos pintar de color verde

-Ron me encanta el azul, es el color de tus ojos y no hay cosa más hermosa en el mundo que eso-

El color se subió a las mejillas del chico Weasley haciéndolo sonrojar.

-Yo no tengo algo tan especial para ti, pero ¿Recuerdas aquella vez que dijiste que deseabas un autógrafo de Viktor Krum, el jugador del equipo de Bulgaria?, bueno cobre un par de favores y por fin pude conseguirlo.

En el pergamino estaba un foto del búlgaro, junto con un autógrafo y una dedicatoria diciéndole lo mucho que apreciaba que siguiera su trabajo.

-A parte de eso, compre algo para los dos, siempre dices que Francia me recuerda mucho a Draco, pero ahora también quiero que me recuerde a nosotros, por lo que pedí unos días del entrenamiento y se que aún te deben unas vacaciones, las puedes cobrar y así tu y yo iríamos 10 días a Francia- Definitivamente Ron no podía amar más a Harry, compartir un recuerdo tan especial como sus países favoritos.

-Te amo Harry-

-Yo más Ron-