23. Sol

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Álbum de fotografías / Ron y Hermione

Artista en Tumblr como: bloomsbury

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Esa mañana Hermione se levantó temprano a pesar de ser sábado. Estaba un poco nerviosa, pero sabía que todo estaría bien.

Procuró no hacer demasiado ruido o movimiento al salir de la cama, no quería despertar por error a Ron, aunque con lo pesado que dormía su esposo tampoco era muy difícil.

Bajó las escaleras directo a la cocina, puso la cafetera, empezó a hacer una mezcla para hotcakes y sirvió un vaso con naranjada. Prendió la radio mágica en un volumen bajo, los rayos de sol de plano verano pasaban la cortina, iluminando todo el espacio, Hermione hacia un pequeño baile de un lado al otro mientras vertía la mezcla en el sartén, su cabello un poco esponjado por el movimiento en la almohada la seguía en el balanceo que hacía con sus caderas.

Cuando tuvo todo listo, lo empezó a poner en una bandeja de madera, y con un movimiento de varita la levitaba para que hiciera el recorrido con ella de vuelta a su recamara. Todo seguía exactamente igual a como estaba unos minutos antes de que se fuera, Ron ahora ocupaba más espacio en la cama, como si se hubiera estado moviendo, buscando a alguien, la castaña involuntariamente sonrió, se acercó y gateó hasta quedar a un lado del pelirrojo, su cabello era un desastre como el de ella, sus pecas se veían más intensas por tantos dias de sol, y tenía un constante rubor que hacía juego con sus largas pestañas y tupidas cejas, suspiró solo con la imagen, podía casi jurar que cada día se sentía un poco más enamorada.

—Ya es de día — Anunció bajito, mientras acariciaba todo su torso, unos brazos la rodearon tan rápido que en un segundo ya estaba encima de él.

—Una hora más — Ronroneó sobre su cabello, habían cosas que no cambiarían nunca, pensó para sus adentros divertida.

—No creo que el desayuno pueda esperar tanto tiempo amor — Conocía de ante mano lo que iba a pasar a continuación, porque Ron siempre volvía a la vida cuando le hablaban de comida, y con un beso y un buenos dias el chico ya estaba sentado, recargado en la cabecera y agarrando un trozo de hotcakes con el tenedor, la chica había quedado frente a él, recargándose con una mano en la cama y con la otra tomando de su taza de café, su corazón empezó a latir un poco más rápido por la adrenalina.

—Te tengo un obsequio — Declaró regresando la taza a la bandeja, para después inclinarse un poco a la orilla de la cama, buscando entre el colchón y la madera, donde había decidido que sería un buen escondite, Ron en cambio se veia algo serio, el probablemente estaba pensando que día era y si se le había olvidado alguna fecha especial.

Ella tuvo que decirle que no, aunque probablemente en unos minutos sí que estarían celebrando algo nuevo.

La envoltura era sencilla, de color blanco y un pequeño moño dorado, el chico lo arranco cada vez más curioso, cuando lo tuvo en sus manos la miro sonriendo con la cabeza ladeada.

—¿Y esto por qué?

Rodeó los ojos.

—Vamos, ábrelo.

Así lo hizo, comenzando a ver el álbum de fotos, las primeras mostraban a muchos, muchos pelirrojos, con un pequeño Ron desde bebé hasta unos nueve o diez años, el chico ahora estaba rojo como su cabello, algunas realmente eran vergonzosas. Merlín, él podía imaginarse sin problemas a su esposa pidiéndole las fotos a su madre y esa asintiendo encantada. Aunque no por eso no podía decir que no eran unas buenas fotos, lo remonto a esos dias donde se la pasaba jugando con todos sus hermanos en el patio de la madriguera.

Las fotos no tardaron en convertirse en un Ron con uniforme en sus años de Hogwarts, claro que muchas eran siempre al lado de un chico delgado y de cabellos azabaches, y una niña de cabello terriblemente crespo y mirada risueña.

—Estas son las mejores fotos — Confesó nostálgico, sus mejores amigos habían marcado fuerte en el, algunas eran en los terrenos de Hogwarts, había una que probablemente tomo Herms, porque solo se podían ver a los dos chicos peleando en el invernadero con una planta la cual Ron no recuerda su nombre. En otra página del álbum en cambio, se podían ver fotos individuales de cada uno haciendo una cosa en especifica, Harry, por ejemplo, en todas estaba con el uniforme de quidditch, y una pelotita dorada en su mano, Hermione era capturada siempre en alguna mesa o sillón leyendo un libro o haciendo tarea, y Ron, hasta ese momento se dio cuenta de todas las fotos que le habían tomado durmiendo en los sillones de la sala común y comiendo.

Luego eran un poco variadas, fotos de navidades, de los tiempos del ejército de Dumbledore, de veranos o con Luna, Neville y Ginny.

Había solo dos fotos en las fichas en las que el trio de oro buscó los horcruxes.

La primera, tomada por Harry seguramente, era en la tienda de campaña, él puede recordar ese momento, Hermione seguía enojado con él por haberse ido, y él, en un intento por ser perdonado estaba diciendo cuanta tontería salía de su cabeza.

Dejo de mirar las fotos para mirar a la Hermione real, que veia las fotos con él, le dio un casto beso en los labios antes de continuar.

La segunda fue tomada unas horas después de que todo terminó, Harry había tenido que estirar sus brazos lo más que pudo para tomarla, él estaba en el centro, con tierra y escombros en la cara, también con un poco de sangre por una cortada que se hizo en la mejilla y unos raspones, Hermione y él a su lado no se veían tan diferentes, los tres se veían cansados, pero por mucho sus miradas mostraban alivio y felicidad, sus pequeñas sonrisas lo demostraban también.

Las siguientes son en su mayoría solo de ellos dos, desde que oficialmente se hicieron novios.

Las primeras citas que tuvieron, las idas al cine, a parques, museos, cafeterías, y un montón más, Ron se sorprendió de darse cuenta de todo lo que habían avanzado a lo largo de esos años, Harry y Draco -que para ese momento ya empezaban a tener algo- se colaban ocasionalmente en algunas de esas fotos, al igual que sus hermanos.

—¡Oh vamos mione! ¿en serio? ¿tuviste que poner esta aquí? — Hermione se burló, ella probablemente ya esperaba esa reacción de él, pero es que demonios, esa foto no debería ni de existir.

Fue de las ultimas navidades, Malfoy y él estaban abrazados -obligados, obviamente- con suéteres de navidad y con una sonrisa que parecia más una cara de asco.

—¡Era necesario! Harry y yo nos esforzamos mucho por conseguir esa foto, él tiene como cinco copias por si Draco quiere deshacerse de la que tienen en la sala.

—No lo culpo —Dijo refiriéndose al hurón.

Se notaba que estaban llegando al final del álbum, pues sus fotos de casados aparecieron, eran de apenas cinco meses atrás, seguidas de esas están algunas que se tomaron en su luna de miel, después de eso eran muy pocas de los últimos dos meses, desde Ron cocinando al estilo muggle, como Hermione en la sala con crookshanks tomando una siesta.

Pero la última fotografía fue la que dejo sin palabras a Ron.

En la foto solo se podía ver la mano de Hermione, pero lo que sostenía... no lo podía creer.

Era una prueba de embarazo, positiva.

Él no se dio cuenta, pero Hermione si, pudo ver como su mirada se ilumino, tanto como los rayos de sol que atravesaban el balcón.

Lanzó un grito de felicidad, al mismo tiempo que dejaba el álbum y se lanzaba a los brazos de la única chica que ha amado.

—Te amo. Te amo, te amo, te amo — Repitió tantas veces que ahora no podía recordar cuentas habían sido, al tiempo que la llenaba de besos, ahora la castaña reía con lágrimas en sus ojos.

Se quedaron en la cama abrazados por un tiempo indefinido el cual no querían que terminara nunca.

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Sinceramente, me había estancado, no tenía una idea clara de que escribir aquí, pero cuando mi cerebro hizo por fin click, me fui hasta de largo. 

FlufftoberDonde viven las historias. Descúbrelo ahora