22 de agosto de 1992
Estaba acostado en mi cama, estos últimos días habían sido un infierno. Cuando deje este lugar tendré mi venganza... pero todo a su debido tiempo, lo fundamental era pensar cómo iba a salir de esto, digo, sabía que no teníamos permitido hacer magia fuera de Hogwarts hasta la mayoría de edad, pero no sabía que el ministerio fuera a involucrarse o a tomárselo tan seriamente. De un modo u otro, lo hecho, hecho esta, hay que armar una estrategia con lógica para poder salir de esto, pero primero voy a dormir.
El sol se había ocultado ya hacía rato, dejando las calles de la vecindad únicamente iluminadas por las pequeñas farolas negras, al igual que la pequeña habitación en la que estaba. Estaba realmente cansado, necesitaba dormir, las últimas semanas las había pasado leyendo a toda hora, tratando de calmar mi ira, ya que sabía que era peligroso. Así como también lo era reprimir esa ira, porque podría afectar mi núcleo mágico, o podría provocar una explosión de magia... Por lo que me dedique a escuchar música y leer para "intentar" mantenerme tranquilo
Ese golpeteo me había estado molestando hacía rato, y si bien había logrado despertarme, no quería salir de la cama, seguro era algún ave que estaba picando el vidrio por haber visto mi lechuza... El tiempo transcurría horriblemente lento y el golpeteo en mi ventana se hacía cada vez más intenso, por lo que, con un gruñido me levante, dispuesto a asesinar al ave, pero grande fue mi sorpresa al ver dos luces que me encandilaban.
Un auto, había un maldito auto flotando en mi ventana, y dentro de este estaba Ron Weasley y sus hermanos, Fred y George
— ¿Todo bien, Harry? —uno de los gemelos pregunto, asentí, aun sin creérmelo
— ¿Qué ha pasado? —preguntó Ron—. ¿Por qué no has contestado a mis cartas? Te he pedido unas doce veces que vinieras a mi casa a pasar unos días, y luego mi padre vino un día diciendo que te habían enviado un apercibimiento oficial por utilizar la magia delante de los muggles. —no lucia enojado, lucia preocupado
— En realidad no o fui yo. Pero ¿cómo se lo supo?
— Mamá trabaja en el Ministerio —contestó—. Sabes que no podemos hacer magia fuera de Hogwarts
Rodé los ojos y me quede ahí en silencio, sin saber bien que hacer.
— ¿No deben volver o algo?
— Sí, pero faltas tú, vinimos a ayudarte, como no contestabas tomamos el coche prestado y vinimos hasta aquí
De un momento a otro había un gancho en las rejas de la ventana, supuse lo que iban a hacer, por lo que me retire al fondo de la habitación, junto con mi lechuza. El otro extremo del gancho estaba atado al coche, el cual acelero cada vez más, y más, y más, hasta que de pronto, y con un estruendo, la reja se desprendió limpiamente de la ventana mientras el coche salía volando hacia adelante. Me incline sobre el marco de la ventana y vi que la reja había caído sobre las begonias del jardín delantero.
— Adentro —murmuro , haciendo espacio
Asentí y me avance en dirección opuesta, dándoles la espalda, abrí el armario y saque mis maletas, y una vez que las tuve, me encamine hacia el auto. Sin embargo, mi lechuza escogió el peor momento para chillar.
— ¡Lechuza estúpida! —oi el grito de Vernon y me apresure para salir
En cuanto puse pie en el auto avanzamos, y, aproveche la distracción de los Weasley para cerrar la ventana con magia, sin varita obviamente, y en cuanto se cerró ellos dijeron algo como "Activa el camuflaje"
Vi a Vernon salir y quedarse estático en la habitación
— No te preocupes, no pueden vernos, el auto es invisible —asentí y me relaje en lo que duro el viaje
ESTÁS LEYENDO
Casi inexistente (𝙩𝙤𝙢𝙖𝙧𝙧𝙮)
FanfictionTodo sucedió cuando Harry se entero del mundo mágico cuando era pequeño, y la tormenta se desato cuando el sombrero lo puso en Slytherin, en lugar de en Gryffindor como Dumbledore había pensado que quedaría. Sin embargo, esto no fue lo único que Alb...