Agatha
Mi vida siempre se ha basado en la monotonía. De la escuela a la casa y de regreso. Nada de fiestas, nada de aventuras y nada de adrenalina. Desde que mi padre murió se apagó todo tipo de luz existente en mi hogar. Mamá regresaba cansada luego de pasarse todo un día atendiendo clientes en un supermercado.
Mi mejor amiga, Bea, llegaba en unos pocos minutos a mi casa, seguramente se le ocurría algún plan desalmado como siempre. Ella y yo somos polos opuestos, tal vez por eso es mi mejor amiga.
Pongo a tope mis canciones de Pablo Alborán mientras canto a todo pulmón por la sala de casa. Casi no escuchaba nada a mi alrededor pero si logré sentir esos fuertes golpes tan familiares en la puerta de la entrada. Sabía quién era sin tan siquiera haber abierto la puerta, Bea.
Camino a la entrada y abro la puerta para verla ahí de pie con su largo cabello rubio siempre bien peinado.- Al fin joder -me reprochó entrando rápidamente -pensé que me quedaría eternamente en la puerta mientras chillas como loca.
- Si te refieres a lo que hacía se llama cantar -le saco la lengua en forma de burla.
- Si claro, ya estaba la policía afuera pensando que estaban realizando una masacre aquí dentro.
- Ay que exagerada -le respondo dirigiendome a la cocina mientras ella me seguía
- ¿Por qué estás tan despeinada?¿Acaso el cepillo se peleó contigo? -me dice burlona mientras intenta peinar mi cabello castaño.
La verdad si me levanté un poco loca hoy, ni siquiera me había cambiado, cosa que ahora Bea me obligaría a hacer.
- No he tenido tiempo, he estado adelantando algunas cosas para que cuando mi madre venga esté todo perfecto.
- ¿Sabes por qué vengo verdad? -me pregunta con una sonrisa en su rostro.
- ¿Porque soy tu mejor amiga y no puedes vivir sin mi? -le doy una sonrisa de regreso.
- Además de eso, hoy es la reunión para el nuevo curso escolar y... -le alzo una ceja sabiendo lo que vendría después -habrán chicos nuevos.
Bea era esa chica linda que se robaba las miradas de todos, sin embargo no era una chica fácil de conquistar, se la pasaba dándome consejos para cuando tuviera mi primer novio, también para cuando diera mi primer beso. Recuerdo la vez que me puso a practicar con la mitad de una naranja mientras veíamos un tutorial de YouTube. Sin duda esta chica y yo teníamos historia juntas.
- ¿Entonces iremos tras tu próxima conquista? -ella asiente sin quitar esa sonrisa del rostro -Bueno vale, seguramente será aburridisimo, tendremos que escuchar los eternos discursos de los profesores sobre la ética escolar.
- Es el costo de conocer a un chico guapo -vuelco los ojos dirigiéndome a mi habitación para cambiarme.
-Ya vuelvo -le digo a Bea mientras ella toma una bolsa de gominolas para irse comiendo mientras me cambio.
Mi ropa sin duda era como mi vida, aburrida, además que casi todo estaba sucio, incluyendo mis jeans favoritos. Lo más decente que quedaba era un pequeño vestido de flores azules que hacían juego con mis ojos. La última vez que me lo puse fue en mi cumple hace un par de meses, desde entonces estaba ahí colgado en la última parte de mi closet. Lo tomé sin pensarlo ya que casi todo estaba en el cesto de la ropa sucia. Acompaño el vestido con mis Converse altos negros y termino cepillandome un poco el cabello. Inmediatamente me encuentro a Bea sentada en el sofá mientras veía un programa de estos de buscar pareja.
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Para Siempre © [Completa]
Teen FictionLa vida de Agatha da un giro al conocer a Christopher, un chico que estaba a punto de atentar contra su vida. Agatha se convierte en el ángel del chico, como él mismo lo dice. La vida de ambos se vuelve en aventuras para celebrar la vida que es el...