Capítulo 9

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Agatha

Puedo sentir debajo de mí el suave movimiento del mar, un sol intenso del medio día quema mi piel. Traigo mis gafas de sol preparadas para la ocasión. Le doy una mirada al chico de al lado mío, bajo mis lentes un poco para demostrar mis rostro en modo competitivo. Vuelvo a colocar mis lentes en su lugar y direcciono la mirada al frente.

- ¿Lista para perder pequeño angelito? -me comenta Chris dando un corto acelerón con su moto de agua.

- Yo nunca pierdo señor Harlem -le doy una sonrisa torcida.

- El primero en llegar a aquella bolla gana.

- ¿Que te apuestas a que yo gano?

- ¿Con que quieres apostar, eh? -alza una ceja y sonrie- De acuerdo, si yo gano me tienes que acompañar mañana a pasar la noche en un lugar que no diré.

- Espero que no sea peligroso, pero está bien -asiento- Y sí yo gano me tendrás que cantar la canción que yo decida.

- Una petición sencilla de tu parte, pero trato hecho -ambos nos miramos listos para comenzar nuestra carrera de motos de agua- ¿Ves aquella gaviota? -yo asiento con la cabeza- Cuando se pose en el agua arrancamos.

Miro detenidamente a la gaviota la cual vuela por encima del agua. Chris también le pone mucha atención, al parecer está preparado, sus brazos dejan ver sus venas mientras sostiene en mango de la moto. Segundos después la gaviota se posa en el agua.
Arrancamos con velocidad.

- ¡Wujuuu! Eres muy lenta Agatha.

Acelera para alcanzarlo y ponerme a su lado, no dejaría que este chico me gane así de fácil. Agatha Luna nunca se deja ganar.

- Te estás quedando atrás sirenita -le digo burlona mientras le pasó con mi moto.

Sin duda estaba disfrutando tanto está adrenalina que por un momento me olvidé que estábamos compitiendo. Se sentía increíble tener todo ese aire chocando con mi rostro, no sé cómo mis lentes no salieron volando.
Miro hacia atrás buscándolo para dar por alcanzada mi victoria. ¿A dónde se fue?

- ¿Me buscabas? -me dice desde el otro lado de mi moto por dónde no miré. Estábamos parejos.

Chris me da una sonrisa torcida acompañada con un guiño y da un pequeño giro con su moto que termina empapándome completamente, impidiendome ver por unos segundos el camino.
Lo miro con la boca abierta.

- Oye, eso es trampa.

- La vida no es justa ángel.

Y sí, ganó. Ambos nos detenemos en las motos.

- Hiciste trampa, por tu culpa perdí un poco el control -él solo me mira con una cara victoriosa.

- Acepta que perdiste, mañana pasaré por tu casa a las seis, quiero que lleguemos a tiempo. -le hago una cara con el ceño fruncido.

- ¿A tiempo para que?

- Tu no preguntes, mejor cumple con estar lista a esa hora. Ah, y lleva traje de baño.

- No me puedo quedar a dormir en un lugar que ni siquiera sé. Mamá no me dejará.

- Dile que vas a dormir a casa de alguna amiga. Seguro te cubren. Además, si vas mañana cumpliremos cuatro de las cosas de la lista de una vez.

- Está bien, mañana a las seis. -hago un silencio de unos segundos hasta que él habla.

- Agatha... -lo miro suavemente al decir mi nombre.

- ¿Si?

- Si te ofrecen disfrutar un momento con alguien, acéptalo sin excusas. Nuestra gente no estará ahí siempre. El día que ya no estén presentes al menos nos quedará eso, los recuerdos.

Para Siempre © [Completa]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora