Entre dos mundos || Merodeadores

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Primer Acto || Parte diecisiete 

"Cita"

—Remus—

Al terminar la clase de historia mágica nos dirigimos directamente al comedor, estaba un poco nervioso por pasear a solas con Artemisa.

Logre distinguirla a unos metros de nosotros hablando con Regulus y Adonis, verla sonreír me  hacia sentir un nudo en mi estomago, creo que eran lo que llaman "mariposas en el estomago".

Al entrar al comedor distinguí que se sentó en la mesa de los slytherins, tome lugar en mi mesa con tal de poder verla.

He descubierto que siento algo por ella, mis sonrojos, mi nerviosismo, mi timidez y esas "mariposas en el estomago" solo las siento con ella. 

Suelo escaparme de los planes de los chicos para ir con ella, pasar tiempo con ella aun que Adonis siempre esta ahí, cancelo mis sesiones de estudio con Lily para estudiar con ella. Mis sentimientos por ella me aterran, especialmente por lo que soy, pero por algún motivo los días antes de entrar la luna llena termino buscándola, su presencia calma a mi lobo. 

Por algún motivo que desconozco, los días que me quedo a descansar en la enfermería después de mis transformaciones ellos vienen y me cuidad. Aun que Adonis se encuentre ahí, solo me fijo en ella, me gusta la atención que me da.

Escuchaba las voces de James y Sirius pero mi atención solo estaba en ella, fruncí el ceño al ver que uno de las serpientes le entrego una pequeña caja de repostería. Sentí un nudo en el estomago al ver como lo abrazaba con tanta emoción, después se giro viendo a su hermano y Regulus para sacar un pastel de la caja.

No debo preocuparme por nada, los mellizos Scamander son fanáticos de lo dulce, tenemos algo en común. Solo es un regalo, o eso es lo que yo quiero creer.

Sonreí inconscientemente al verla tan emocionada comiendo una rebanada de aquel pastel, me daba ternura verla como trataba de darle de comer a Regulus. Sonreí por lo bajo al ver como termino ensuciando la cara de Regulus.

—¿Qué tanto ve Remus?—escucho que James le pregunta a Sirius.

—No lo sé, pero esta viendo a la mesa de las asquerosas serpientes—le responde Sirius, ambos voltean a ver a la mesa de Slytherin—. ¡Remus!—exclama Sirius llamando mi atención—. ¿Por qué miras tanto a los mellizos? Algo te hizo Artemisa, actúas extraño desde la clase de transformaciones.

—No tengo nada—trato de evitar que cause un escandalo, no quería que arruinará mi cita con Artemisa. Me sonroje ante mis pensamientos, tendríamos una cita.

—¿Por qué te sonrojas?—me pregunta James.

Bien hecho Remus, ahora no te los quitará de encima.

—Habla Lupin, ¿por qué tan sonriente mirando la mesa de las serpientes?—Sirius me mira interrogativamente. 

—No te interesa Sirius.

—Vamos Remus, somos tus amigos—James me mira con una sonrisa—. ¿Acaso no confías en nosotros?

—Claro que lo hago, solo no quiero que Sirius cause un escandalo.

—¿Por qué causaría un escandalo?

Iba a responderle cuando un toque en mi hombro me hace voltear, no me di cuenta cuándo se levanto de la mesa.

—Siento interrumpir—se disculpa Artemisa tímidamente—. Solo quería avisarte que iré a dejar unas cosas a mi sala, no quería preocuparte por si no me veías.