CAUTELOSOS [ En Edición ]

CAPÍTULO 35

ANAITA WORSTED

Las chicas y yo nos encontrábamos encerradas en la habitación de Josenea hace como dos horas, donde nos la pasamos comprando por domicilio cosas para bebés.

La idea de ser tía me llenaba de emoción tanta que pensaba parecer una niña pequeña aplaudiendo. Al fin y al cabo mi hermano hizo algo bien en su vida (sin ofenderte Bael)

Ava y Josenea juraban que iba a ser niña, mientras que Emily y mi querido ser; decíamos que sería niño, por que si conozco los genes de mi familia como para saber a ciencia cierta que siempre los primeros hijos son varones.

-bueno que dices del verde pálido - comenta Emily

-no, parecería un jardín y tiene que aparentar ser un cuarto para un bebé.

-hay Josenea eres la mujer más difícil que conozco, entonces cual quieres - se quejo Ava

Yo andaba ajena al asunto de la selección del color para la habitación, estaba más entretenida comprando y mandando por la borda mis cuentas bancarias para comprar juguetes y ropa para mi sobrino

Por que si es niño y punto.

-oigan bajen a comer parecen topos en ese cuarto - Mikaella y su buen humor, no.

Bueno si que hacia hambre, eran como las nueve de la noche y sólo había comido el helado, vamos y llegando al comedor vemos que sólo falta vamos nosotras.

-por fin - alegó Ming -que tanto hacían, una orgía.

Reímos a ante su comentario, me siento en la mitad de mis novios, quedando alfrente de Hades y Ava.

Empezamos ha hablar sobre el embarazado de Josenea, las cursilerias que tenía Hades con su prometida mientras estaban solos y pensaban que nadie los veía.

Dhack estuvo a punto de enterrarlo el cubierto a su hermano por decir lo bueno que estaba Gamal pero para la desgracia de pocos tenía que ser un idiota. Claro como buena cuñada y buen sentido del gusto apoye, ganándome un apretón en mi muslo y una mirada de advertendia que me calló en un dos por tres.

-entonces el me dijo que si no subía a ese avión por mi cuenta, le valía una mierda cargarme y obligarme a abordarlo - terminó de comentar Marcela la historia de Papa y ella

Era demasiado graciosa y cliché, aunque era una de las mejores en toda la eternidad.

Reíamos e interactuamos como una verdadera familia una que no esta siendo cazada pero aún así se siente ese ambiente cálido en todos, fue un hermoso recuerdo que guardaré en mi mente y en la cámara de Ava quien nos toma fotos por petición de Wen.

-Señor llegaron estos paquetes- un guardia llega con cuatro cajas - ya las revise tres veces no se detectan signos de alarma.

-gracias ya te puedes retirar, vuelve a casa se que eres de la tarde y ya son más de las diez - ordenó Sathiel

El chico asintió contento y no demoró en desaparecer, el diablo puede condenar y matar pero aún así proteger y gobernar el infierno es lo más preciado, y eso nos indica que todo lo que este dentro de este debe ser protegido.

-dice que es para la señorita Quesinda- lee con rarez el nombre Bael, levanta la vista y mira quien se llama así

-ay para mi que rápidos son, no mentía el comercial -digo estirandome para atraer las cajas hacías mi

Quesindia, si un pésimo y raro nombre. Pero fue lo único que se me ocurrió no puedo poner mi nombre en específico, es como dejar migajas de pan.

Empecé a destapar la primera caja, quite el envoltorio dejando ver un hermoso biberón de oro puro, con diamantes de verdad y un chupete también del mismo estilo.