¿Que es la libertad? ¿Por qué no podemos cruzar la reja? ¿Por qué hay números en nuestros cuellos? Son preguntas que rondan en mi cabeza constantemente pero, probablemente a la que más quisiera hayar una respuesta es al ¿por qué tu y yo no podemos s...
--------------------------------------------------------- Una vida sin sombras del pasado... ---------------------------------------------------------
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El tiempo en el mundo humano transcurría más rápido que en el de los demonios. La llegada y introducción de los niños ganado al mundo humano ya había sucedido hace poco más de un año. Muchos de ellos se habían acostumbrado rápidamente al estilo de vida en aque mundo. Mientras que los que alguna vez habían sido usados como conejillos de indias en la plantación de lambda A7214 ya se encontraban en un buen estado de salud.
También había pasado un año desde que dos chicos de cabello bicolor habían aparecido en medio de las calles de una gran ciudad.
El señor Briston se había vuelto el tutor legal de ambos castaños y había comprobado que eran hermanos gracias a pruebas de ADN, dandole como resultado que eran gemelos, los dos castaños se alegraron ante la noticia, después de todo si compartían lazos sanguíneos. También le habían hecho pruebas a Raji. Leonard sentía una gran preocupación por ella, quería saber que era lo que tenía, pero las investigaciones no llegaban a ninguna enfermedad conocida.
Lo poco que se habia podido investigar era que su sangre estaba contaminada, una enfermedad de lento avance, o así lo denominó uno de los científicos. ¿Alguna cura? Por ahora nada ¿Tratamientos? Uno, gracias a las pastillas que habían en la mochila de la castaña habían logrado replicarlas, al parecer eran buenas para sus convulsiones, sin embargo estos no impedían que la enfermedad avanzara.
Por ahora la ojirosa tenía que acudir a cheques semanales para ver su estado, odiaba los laboratorios le causaban un miedo que ella no entendía pero su gemelo siempre iba con ella calmando sus angustias y dándole su apoyo. Gracias al tutor de ambos chicos las investigaciones iban a seguir hasta encontrar una cura o un tratamiento más efectivo para la enfermedad de la ojirosa.
Por otro lado ambos chicos le habían agarrado un cariño enorme al señor Briston, prácticamente se había vuelto un padre para ambos, es por ello que buscaban ayudarlo en cualquier cosa incluso cuando no era necesario. El hombre por su lado también los quería, ese par de gemelos habían aliviado su soledad. El había decidido darles educación, matriculandolos en uno de los colegios más prestigiosos de la ciudad, grande fue su sorpresa al ver que ambos habían obtenido puntaje perfecto al rendir la prueba de ingreso. Esto sólo les abrió aún más las puertas a dicha institución, en la cual pasaban gran parte del día.
Los dos jóvenes no habían logrado recordar casi nada, a veces veían personas entre sueños pero sus rostros eran irreconocibles al igual que sus voces, era algo frustrante. Pero habían decidido dejarlo atrás, no querían que su pasado los atormentase, por lo que sólo querían sonreírle a su nueva vida, crear nuevos recuerdos y ver hacia el futuro en vez del pasado.
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