Me he cansado de no encontrar historias de estos dos y me he decidido a escribirles una, a pesar de ser mi primera vez en esto jakqkekq
Inicio: 8 de noviembre del 2021
Fin: 26 de abril del 2022
Me desperté con un dolor en mi espalda, no podía levantarme. Sentía que estaba encima de algo suave y calentito, giré un poco mi cabeza para encontrarme con Shin-chan totalmente dormido. Me había quedado dormido encima de él. Su cabello es tan oscuro y suave, pensé. No pude evitar tocar sus mechones. Esto es un sueño? Talvez. Recordé todo lo que hicimos y me avergoncé pero no me arrepentía de nada, pues presencié expresiones de Shin-chan que no conocía. Traté de levantarme sin hacerle despertar.
—Wow, realmente usamos 2 cajas de condones—sonrió viendo ambas cajas tiradas en el suelo completamente vacías
Wakasa sintió algo pegajoso salir de él, solo suspiró y se metió a la ducha. Minutos después, Shinichiro seguía dormido pero en cuanto dejó de sentir el cuerpo de Waka se levantó desesperado en su búsqueda. Lo buscó por todo el cuarto y al intento de entrar al baño chocó con Wakasa quien iba saliendo de ahí.
—Eso dolió— dijo Waka- que estás buscando?— se sobaba la cabeza.
—A ti, pensé que te habias ido— soltó una risilla y topaba su frente también.
—Y a donde me iba a ir tonto— suspiró.
—Y bueno... Estas bien? Puedes caminar bien?— preguntó preocupado.
—Me preguntas eso cuando hiciste de mi lo que quisiste— se empezó a reír Waka.
Shinichiro se sentia algo apenado
—Shin-chan no me duele nada, de hecho me gustó todo lo de anoche.— le dirigió una sonrisa coqueta.
—Disculpa si me sobrepasé— dijo.
Waka se acercó a Shin para darle un corto pero suave beso.
—Ve a bañarte—le miró a los ojos y luego se fue al cuarto para alistarse.
-Me gusta... Realmente me gusta.— se dijo Shinichiro en su mente. Acto seguido metió a bañarse también.
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—A donde vas?—caminó Shin hacia la cama.
—A donde vamos querrás decir— decía el contrario poniéndose una chaqueta.
—Pero es domingo— se tiró en la cama.
Waka se encontraba sentado en una esquina de dicha cama.
—No crees que tu abuelo está preocupado?— le preguntó fijando su mirada en el. Se levantó para buscar sus zapatos.
Shinichiro se levantó también y le abrazó por detrás.
—Esta bien, vamos— susurró empezando a besar el cuello del peliblanco. Su mano derecha empezaba a subir por su cintura llegando a su pecho. Con la otra tomaba del cuello a Waka, empezaba a besarle por todo el rostro.
