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Capitulo 16

Mierda como me dolía la cabeza, ya no tengo la edad para beber de esa manera. Pero el problema es que no sólo habíamos bebido también terminamos drogadas por culpa de Sanzu y los dioses solo saben que cosa les metió a esos deliciosos brownies.

Senju y yo dormimos abrazadas toda la noche, no recuerdo como llegamos a la cama, de hecho no recuerdo casi nada de lo que pasó despues de que Sanzu nos gritara como histérico.

Los párpados me pesaban, el sol me calaba, sentía la boca seca y podía jurar que no había sudado como si hubiera corrido un maratón.

-¿Senju?- Dije casi a susurros porque sentía que si hablaba más fuerte me estallaría la cabeza.

-¿Mhmm?- fue su única respuesta.

-¿Sigues viva?

-¿Si estuviera muerta te hubiera contestado?- de las dos ya quedó claro quien era la inteligente.

-No lo sé- tal vez aún estaba drogada y era el fantasma de Senju quien me contestaba.

-Aún tengo hambre Mei- Es cierto, la principal razón por la que comimos eso era porque moríamos de hambre y aún así no pudimos comer nada decente.

-Yo también- Aún debía tener alucinaciones olfativas porque podía sentir el olor a comida haciendo cosquillas en mi nariz.

-Y creo que sigo drogada porque puedo oler tocino desde aquí- Las dos no podíamos estar alucinando lo mismo ¿o si?

-Lo huelo Senju.

Nos levantamos rápidamente de la cama, tanto que me terminé mareando un poco, salimos disparadas a la cocina tropezando con nuestros zapatos, Kazutora y Sanzu estaban desayunando algo que se miraba muy grasiento pero delicioso ¿habían pasado la noche aquí?. Muto estaba frente a mi estufa, moviéndose como si estuviera en su propia casa, pero tal vez si me da algo de lo que está preparando puedo perdonarle estar de fisgón con mis cosas.

-Vayan a sentarse ahora les llevó la comida- Siempre tenía la misma expresión de enfado en su cara pero hoy no estoy para juzgar a quien me va a alimentar.

-En definitiva eres mi favorito entre todos los amigos de mi hermano- Le dijo Senju de la forma más amigable que le fue posible.

-Voy a fungir que no escuché eso- Se quejó Kazutora que apenas se había dado cuenta de nuestra presencia -¿Cómo amaneciste Mei?

Avergonzada, con resaca, con hambre, me sentía sucia y sobre todo tenía muchas preguntas.

Iba a disculparme con Kazu por cualquier cosa que haya dicho o hecho cuando Senju se abalanzó sobre su hermano tirándolo de la silla y sentándose en su estomago mientras le sostenía las manos para que no pudiera moverse.

-¡Eres un imbécil Sanzu, pudimos haber muerto por tu culpa!- Haruchiyo forcejaba debajo de Senju pero todos sabíamos quien tenía el control en la familia Akashi.

-A mi no me culpes, ustedes saben que no deben comer nada que esté en mi casa y no sepan de dónde viene.

Él tenía razón después de todo nosotras asaltamos su cocina y debimos imaginarnos que sus brownies tenían algo. No hay que ser muy listo para suponerlo.

-¡Pudiste ponerle una etiqueta!

-¡Es mi casa no tengo porque ponerle un puto nombre a mis cosas!- Se agachó sobre la cara de su hermano y le mordió la mejilla izquierda hasta que se le puso roja e hinchada. Senju soltó a Haruchiyo y lo ayudó a ponerse de pie, después de su pequeña pelea de hermanos los dos actuaron como si nada hubiera pasado, si le intento hacer lo mismo a Waka seguro no vivo para contarlo.

-¿Cómo te sientes Mei?- Kazutora había dejado de comer para ir a donde yo y me abrazó, se miraba muy preocupado por mi situación actual.

-Muy mal, siento que la cabeza me va a estallar- el dolor podría ser una mezcla de hambre, resaca y cansancio.

Me daba un poco de pena estar así de cerca con Kazutora debía de estar horrible y apestosa, después de desayunar tomaría un baño de varías horas.

Sanzu se miraba la mordida en la pantalla de su celular, pasando sus dedos en las marcas de los dientes de Senju. 

-Podrían fumar un porro y...- Pero Kazutora lo calló con la mirada -Yo solo opinaba.

Podía dejar pasar la situación y actuar como loca como si nada hubiera pasado ayer, pero si hice algo malo debía saberlo para arreglar la situación, el estar drogada no era una excusa para actuar como una desquiciada, Sanzu había estado con nosotras en el momento en que empezaron los efectos, si alguien sabe exactamente lo que hice es él.

-Sanzu ¿Qué fue lo que hice ayer?- Mientras no me hubiera desnudado podía sentirme tranquila.

-Me besaste y con lengua- vio de reojo a Kazutora para ver su reacción, pero me aprisionó aún más entre sus brazos al escuchar las palabras de su amigo. No, no, no, no debe de ser una broma, una sola cosa me había pedido Kazutora, una sola y no logré cumplirla-Bromeo, solo hablabas del idiota que no te suelta.

Gracias a los dioses, no podría imaginar la decepción en Kazu si eso fuera verdad.

-Aquí tienen- Muto dejó los platos en la mesa, parecía harto de tener que estar aquí.

-¡Te amo Muto!- Los cambios de humor de Senju ya comienzan a preocuparme.

Mientras desayunábamos, Kazu me dio unas pastillas para el dolor de cabeza, no paraba de mirarme, parecía que me estaba estudiando o tal vez quería ver si tenía algún efecto secundario por las drogas.

Despues de que nuestras visitas se fueran y yo me quitara toda la mugre de encima, Kazutora y yo nos fuimos a descansar a mi cama, me recosté sobre su pecho mientras mirábamos una película de comedia que él había escogido.

-¿Recuerdas a Takemichi y Hinata?

-Si, se hospedaron donde yo trabajo- También había cenado con ellos en casa de Kazutora y me parecieron bastante agradables.

-Se casan en un mes y quiero que seas mi acompañante- Si decía que no, me perdería la oportunidad de ver a un Kazutora con smoking.

-Entonces tengo que buscar un lindo vestido para ponerme ese día- me estiré un poco para dejarle un dulce beso en la mejilla.

-Pero que no sea demasiado lindo, no quiero que opaques a la novia... eres muy hermosa y si alguien te ve mal podría haber problemas.

-¿Eres celoso?- Con un solo vistazo que se le echaba a Kazutora no parecía el tipo de hombre celoso, era atractivo a la vista y su forma de hablar, vestirse y moverse gritaba que se sentía muy seguro de si mismo.

Tomó mi muslo e hizo que lo subiera a su pierna, quería acortar la poca distancia que nos separaba.

-Mhmm...- Kazutora estaba disfrutando el dejarme en suspenso un rato -Solo contigo Mei.

Cuando estuvimos a punto de besarnos mi gato tiró un vaso de agua que siempre ponía en la mesa al lado de mi cama. 

-Creo que Sushi no quiere que nos besemos.

-Es un gato inteligente nena- Me iba a parar a recoger los pedazos del cristal pero Kazutora me detuvo -Deja, yo lo hago.

Formalizar las cosas con Kazutora no se escucha mal después de todo, me gusta yo le gusto. Me trata lindo, se esfuerza por mantener la realción que tenemos, creo que me toca a mi dar el siguiente paso. Tal vez despues de la fiesta pueda decirle que usemos la etiqueta de novios.

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Elijan bando porque se viene drama.

Team Kazutora ó Team Hanma

Soy team Hanma