No es por ser egocéntrico pero hay que admitirlo, actuar me sale muy natural.
Ver a Taeyong tan nervioso por no saber cuál sería mi siguiente paso fue lo más divertido, me preguntó qué cara habría puesto Yuta si nos hubiera visto en ese momento.
La verdad es que ya había perdido un poco el gusto por el niño bonito pero no iba a dejar ganar a Yuta y menos ahora que llevo la delantera, sé que con lo que hicimos va a empezar a pensar que le gustó, si no lo hiciera no me hubiera dejado llegar tan lejos.
—Te estoy hablando, idiota— Yuta me golpeó el hombro para llamar mi atención, yo no podía más que sonreír al recordar todo lo de la noche pasada —Es raro que Taeyong no haya querido desayunar con nosotros, y encima se llevara a su amigo con él—.
—Tal vez ya se aburrió de verte todos los días en la habitación— rodó los ojos y siguió comiendo su desayuno, yo no era de desayunar más que un café así que solamente estaba ahí para acompañarlo hasta que las clases iniciaran, ya quería ver a Taeyong.
Cuando el timbre sonó fuimos por el material necesario para nuestras clases y después de despedirnos nos fuimos a nuestra clase.
Cuando entré al aula Taeyong ya estaba ahí, estaba dibujando algo en su libreta así que aproveché su distracción para sentarme a su lado y acariciar su cabello.
—¿Es mi imaginación o me estás evitando?— pasé mi mano a su mejilla derecha.
—No es tu imaginación, realmente no quería verte— quitó mi mano y me vió, rápidamente cambio su semblante serio a uno de arrepentimiento —Quiero decir, no me sentía listo para verte, es muy confuso para mí pero lo que tengo claro es que no puedo corresponderte— mi sonrisa se borró a escuchar lo último pero no lo iba a dejar tomar esa decisión tan rápido.
—¿Puedo saber por qué? Si hay otra persona no me interesa, quiero que seas feliz, Yongie— tomé sus manos y le sonreí —Si crees que lo que pasó no significo nada para mí no es verdad, realmente me gustas demasiado— lo iba a besar pero en ese momento entró el maestro al aula.
Tomamos clases, yo como normalmente lo hago, pero él era bastante obvio que estaba muy nervioso por todos los movimientos que hacía, algunas veces me hacía perder la paciencia pero no tenía que parecer molesto.
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—Ven, vamos por Yuta y Sicheng— cuando terminó la clase lo tomé de la mano para salir e ir al aula de esos dos, iban saliendo por lo que Yuta al vernos llegar de la mano se molestó, mi amigo era tan obvio.
—Tae, tienes mucho que aclararme de lo que me hablaste en la mañana— le dijo Sicheng y Taeyong me soltó para decirle algo al oído.
—Parece que tú también— dijo Yuta mirándome, no tenía ninguna expresión en su rostro, realmente estaba molesto —¿Por qué no vamos a hablar?— yo solo asentí, nos despedimos de Taeyong y de Sicheng para irnos lejos; a esta hora ni siquiera los baños son una opción para platicar a solas así que solo nos aseguramos de estar lo suficientemente lejos de ellos.
—Dime— dije como si no supiera de lo que quería hablar.
—Sicheng está enojado contigo, dijo que eras un tonto y que si querías estar con uno de los dos te decidieras pero que no estés ilusionado a los dos— cerró los ojos y se recargó en el árbol —No sé que le hiciste a Taeyong, porqué sé que le hiciste algo, pero no la vas a tener fácil, Tae pasa toda la tarde conmigo en el cuarto, tengo más tiempo con él que tú— abrió los ojos y me vió, yo solo le sonreí con burla.
—Él nunca me dijo que no, así que ya llevo un punto extra, solo tengo que hacerle creer que no fue algo de una sola noche y todas esas tonterías cursis— la cara que puso hizo que me dieran ganas de reír —Ya vamos, mi futuro "novio" y Sicheng nos están esperando— me di la vuelta dejándolo a él atrás.
Cuando llegué con Taeyong y Sicheng abracé al primero por la espalda, sentí como se tensó pero no lo iba a soltar, le besé la mejilla y me senté frente a él porque Sicheng estaba a su lado.
Yuta sabía que no había que hacer tratos conmigo porque tengo muchas cosas a mi favor, pero aún así lo hizo, pobre de él.
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「¿Él o yo?」 ✧ Jaeyong ✧ Yutae✧
Fanfiction🍃 Así que Taeyong, elígeme a mí, nadie se va a arrepentir de eso y no te faltara nada; si lo eliges a él va a ser la peor decisión que has tomado.