Girl [Meling] [Corrigiendo}

Capítulo 24

El castaño había llegado al sitio donde se estaba produciendo una batalla entre su querido compañero y su amado, se sorprendió al ver que Meliodas era totalmente diferente al que conocía, eso le hizo sentir un terrible escalofrío por todo su cuerpo, su aura era diferente, pero eso no era lo que lo había asombrado, ya que aquel rubio tenía su espada incrustada en el vientre de Escanor.

Los demás pecados poco a poco se encontraron en el área donde el hada estaba viendo. La platinada se acercó al castaño el cual había descendido inconcientemente, le colocó su mano en el hombro en busca de su atención.

-- Se como te sientes -- tomó la mano del castaño. -- Aprietalá cuando tengas la necesidad.

El hada sólo asintió ante las palabras de la princesa. Volvió a dirigir su vista a la batalla, donde se encontró ahora al león del orgullo tendido en el suelo, esto le preocupó.

-- Logró derrotar a... Escanor... -- veía aquella escena con una mezcla de horror y asombro. -- Merlín...

-- Merlín, quita el hechizo, tengo una idea.

-- No puedo hacerlo princesa, aunque tus intenciones sean nobles si deshago el hechizo del *Cubo Perfecto*, Meliodas no dudará en matarnos.

-- Ay -- se quejó el animal. -- ¿Hay alguna manera de deterlo?

La maga asintió y señaló el astro más brillante en el cielo.

-- Pronto será medio día.

El castaño volvió a dirigir su vista a la batalla que estaba pasando a algunos metros de él.

Escanor se puso de pie con un salto, notó como intercambiaron algunas palabras para que después Escanor aumentará su tamaño y sentir una mayor cantidad de poder mágico, pero no era nada comparado con el de Meliodas, al menos... Todavía no.

El suelo que estaba al rededor del león comenzó a derretirse y se convirtió en lava con algunas rocas flotando, a lo que él rubio sólo veía lo que estaba pasando. Escanor pronto comenzó a avanzar hacía el rubio y mientras lo hacía el suelo se derretía con sólo poner la planta de su pie en esté.

-- ¡*Corte Supremo*! -- se escuchó aquel ataque de parte de Escanor y como era dirigido al demonio de blondos cabellos y una nube de polvo actuó como cortina de humo impidiendo ver lo que aconteciá dentro del cubo.

-- ¡Meliodas! -- las lágrimas amenazaban con salir, fue cuando sintió un pequeño apretón en su mano y sabía que la princesa lo estaba invitando a que apretará su mano, para cesar un poco el dolor.

El polvo poco a poco se comenzaba a disipar y se vio al humano parado, pero unos segundos después el rubio le había dado un puñetazo tan fuerte a Escanor que se vio como este golpe se hundía en el pecho del humano, el cual cayó de rodillas para después ser detenido por una pierna del rubio que la había puesto en su hombro, quién lo miraba con una sonrisa burlona.

-- Ni siquiera Escanor con su poder al máximo es capaz de detenerlo -- se preocupó mucho el cerdo al ver los resultados de la pelea.

-- Es inneviable, ahora el poder de Escanor es de 114 000 y se enfrenta al capitán; un demonio que lo supera por mucho, su poder es de 142 000. Si sigue así... Escanor podría morir...

-- Creo que voy a vomitar... -- dijo el castaño llevándose su mano libre a los labios, sentía esa sensación de asco, tal vez era por el evidente dolor de cabeza que le había provocado el rubio por culpa de su imprudencia, si tan sólo no ubiera caído en esa trampa la historia sería diferente.

Había dejado de escuchar la conversión de sus compañeros, el mareo estaba incrementado pero quería hacer todo lo posible por que sus amigos no notarán esto, así que apretó la mano de Elizabeth, por suerte para ambos, él chico no era muy fuerte físicamente hablando, así que la platina soportaba bien los apretones de manos del castaño.