SOLUM (+18) I COMPLETA I

CAPÍTULO 10

SAMAY

Esto no es posible...

¡¿Están montando una maldita fiesta en el bosque?!

Efectivamente. Griffin y Maddison, en cuanto llegamos al lugar, separaron sus manos y se sumergieron en la fiesta desde diferentes extremos, supongo que para evitar ser vistos juntos. Yo, en cambio, me escondí detrás de un árbol mientras observaba atónita la cantidad de adolescentes que se encontraban reunidos en una especie de campamento.

Se me ocurrió pensar en aquel campamento de la foto que encontré en el cuaderno pero los lugares no coincidían y llegué a la conclusión de que no se trataban del mismo sitio.

Tragué grueso mirando con más atención. Había aproximadamente unas treinta personas de distinto sexo. Algunos bailaban al ritmo de la música que salía de uno de esos parlantes inalámbricos. Ríen y conversaban entre ellos. Cerré los puños cuando noté que muchos llevaban un vaso de plástico en sus manos con, probablemente, alcohol. Estoy un cien por ciento segura de que ninguna de estas personas se tomará la molestia de limpiar después.

¿De qué se trata todo esto? Digo, si esta banda de adolescentes quería pasar un buen rato, podían buscar cualquier otro lugar en el cual divertirse. Pero, en cambio, eligieron un bosque que se encuentra a, al menos, treinta kilómetros de distancia de la ciudad. ¿En qué cabeza cabe?

A ver, considerando la actitud de los niños hormonales de hoy en día, tal vez no debería sorprenderme. Muchos chicos de esta edad están desesperados por un poco de diversión y que el mismo no traiga consecuencias. Incluso diría que fue inteligente montar todo aquí, así no tienen a nadie que los acuse por ruido. Sin embargo, es increíble que se tomaran la molestia de venir hasta aquí. Si fuera así, ¿no debería haber autos cerca?

Quién sabe hace cuánto estos tipos se encuentran aquí. Ahora mismo, si me encontrara en mi torre, lo más seguro es que no escuchara la música debido a la distancia. Así que no descarto la posibilidad de que este sea su primer día en el lugar.

¿Qué debería hacer? Mi responsabilidad sería parar la fiesta y confiscar cualquier objeto que pudiera producir un desastre aquí. Y dado que la mayoría ya se encuentra en estado alto de ebriedad, la posibilidad se intensifica con el pasar de los minutos.

El problema aquí es que, en realidad, este ya no es mi problema. Después de mi conversación con Killian, entendí que el trabajo de vigilante no era más que una farsa. Aún no entiendo por qué alguien se inventaría algo así, aunque se me ocurren dos posibilidades: ese chico que me entregó el volante estaba muy aburrido e inventó el anuncio, o alguien sabía que yo tomaría el puesto y se aseguraría de que viniera aquí.

Si busco conexiones, es posible que las encuentre. En lo que respecta a la segunda opción, no me parece tan disparatado. Primero Killian y su extraña presencia, luego Griffin y Maddison que extrañamente sabían mi nombre y hablaban de mí como si nos conociéramos, y luego está el hecho de que aquí en Solum, cosas muy extrañas están pasando. Y tengo el presentimiento de que hay algo de lo que no me estoy enterando.

Bueno, si bien ya no tengo la responsabilidad del trabajo, no significa que no me preocupe que estas personas dañen el bosque. Ya me encariñe con él.

Pero... ¿cómo enfrento a esta cantidad de adolescentes? La mera idea me hace temblar. Nunca tuve esa facilidad para portar una postura demandante y hacerme escuchar. Lo más probable era que todos se reirían de mí en cuanto pusiera un pie frente a ellos.

Miro la escena en busca de caras conocidas. Siento una opresión en el pecho en cuanto veo a Killian sentado en un tronco... junto a una chica.

Ella habla animadamente, con un brazo sobre su hombro y una mano en su cabello, acariciándolo. Él se deja pero parece que su atención no está puesta en la conversación que le brindan. Su mirada está clavada en el suelo y su ceño se mantiene fruncido.