SOLUM (+18) I COMPLETA I

CAPÍTULO 37

SAMAY

Me dolía tanto la cabeza. El hecho que de repente, tantas cosas cobraran sentido, que los recuerdos comenzaran a llegar a mi de forma abrupta, de que tantos rostros se me hagan ahora tan familiares, y el sentimiento de haberme perdido de tanto, hacen que mi cráneo se sienta hinchado y adolorido.

Tenía demasiadas preguntas para Killian y otras para mi hermano. Sin embargo, sentía que no era el momento, pues mi novio apuntaba a Roy con un arma que había sacado de su espalda y parecía que cada minuto era contado.

El chico con el que crecí toda mi vida lucía como un auténtico lunático, con su cabello todo desordenado y su rostro impregnado de ira y locura. Todo lo que me había acabado de contar aún se procesaba en mi mente porque, básicamente, estaba cayendo en cuenta de que mi hermano mayor se había convertido en un asesino y una persona peligrosa. Hasta me dolía verlo a los ojos con la verdad ahora a la luz. Había mantenido a Brianna cautiva aquí por más de un año solo porque sabía que nadie la buscaría. Y, Courtney, por otro lado, se había aprovechado de su debilidad y su inestabilidad para cobrar venganza.

Por mucho que ame a Roy y quisiera intentar justificar sus actos, es imposible hacerlo. No puedo perdonarle lo que hizo sólo porque le rompieron su corazón y lo trataron como una basura. Yo he obtenido eso por años y nunca se me ha cruzado por la cabeza hacerle daño a Brianna por eso. Lo que claramente me indica que Roy tiene un problema muy grande y que definitivamente lo había perdido.

-Samay, hermanita- deja salir una risa nerviosa- Vamos, entiéndeme. Yo no quería hacerle daño pero... ella me lastimó tanto.

-No era la manera, Roy.- gruñí con mi vista borrosa- No tenías ningún derecho a retenerla aquí en contra de su voluntad.

-Brianna merecía recibir su merecido.- su mirada se conectó con la de Killian- Dile a tu novio que baje esa cosa. No va a dispararme.

-No estés tan seguro.- masculló él.

-¿Matarías al hermano de tu novia? Samay jamás te lo perdonaría.

Sus palabras llegaron a mi como balas en el pecho. No quería pensar en esa posibilidad porque, si bien Roy ya se había convertido en una persona completamente diferente, no significaba que todo se había perdido. Lo que teníamos como hermano y hermana por supuesto que sí. Pero él por lo menos podría tener la oportunidad de repensar las cosas, asumir sus actos y aceptar las consecuencias. Por mucho que doliera admitirlo, Roy merecía estar tras las rejas, tal vez en un lugar donde lo ayudaran mentalmente.

Miré a Killian y le hice un gesto para que bajara el brazo. Sin embargo, apreté su mano en señal de que se mantuviera atento. No me preocupaba del todo, pues Roy se encontraba desarmado y además estaba rodeado. Pero no perdíamos nada con mantenernos alerta.

-Se acabó, Roy. Deja libre a Brianna- señalé el pasadizo- Iremos por ella y luego volveremos a casa.

¿Me creería si le hacía pensar que realmente actuaría como si nada hubiese pasado? ¿Eran buenos mis dotes de actriz? ¿O él era lo suficientemente estúpido?

-No quiero que entres allí.

-Entonces tráela.

Roy torció la boca y miró hacia atrás. Parecía nervioso, o indeciso. No podía deducir con exactitud sus muecas ahora que él me resultaba un completo extraño.

-Si te dejo verla... ¿me perdonarás?- cuestiona mirando con ojos llorosos- ¿Volveremos a casa y todos, incluyendo tus amigos, olvidaremos lo que pasó?

-No puedo hablar por los demás...

-Cambiemos la historia. Digámosles que Brianna estaba loca y que me secuestró. Demos vuelta las cosas.