【13. Quemarse】

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— Hola, Will.— Sebastian, el aun mejor amigo de su madre, lo recibió alegremente en la habitación de hotel donde se estaba quedando— Te estaba esperando, ¿desayunaste?

— Tío Seb, gracias por aceptar hablar conmigo.— el joven de dieciocho años le sonríe mientras cierra la puerta a su paso— Desayuné con Irina, gracias. 

— ¿Cómo está ella? Supongo que la situación le está afectando.

— A todos, en realidad. Pero está bien, ella me ayudará a recolectar las historias de Tom. Realmente no quiero verlo, tuve suficiente con ser amable con él la otra vez.— se sentó en el sofá individual que había al rededor de una mesa de café.— Pero creo que ambos sospechan el porqué lo hago. 

— Bueno, es sospechoso que, teniendo en cuenta la situación de ambos, quieras recolectar sus memorias de amor— el mayor rascó su barba— Pero es lindo lo que haces, William. Espero que funcione.

— Igual yo.—suspiró— Odiaría que se divorcien. No me importa Tom, ya no más, no es mi padre ni nada mío tras su traición. Pero es el amor de la vida de mi madre, nosotros nos iremos de casa en algún momento, tú tienes una familia, el tío Harry e Ian tienen sus propias familias. ¿Se quedará sola cuando yo no esté? ¿Cuando no estén Jules, Kai, Irina o Beth? 

— William, cálmate— Sebastian camino hasta él y tomó la mano que él había estado apretando inconscientemente— Todo estará bien. 

— Mamá sufre porque los hijos de Tom la odian. 

— ¡Ha! ¿En serio crees que esos mocosos odian a Sofía? Lo dudo mucho, Will. Simplemente están dolidos por lo que está pasando. Y tú estás molesto con ellos, no los llames así, son tu familia.— despeinó el lacio cabello del joven— Además, Sofía decidió decirles lo que pensó que era mejor. Créeme que ella se sentiría peor si fuera Tom quien ellos odian. 

— No lo entiendo. 

— Sofía compró, remodeló y revivió esa casa para formar una familia con Tom. Su sueño era tener un hogar donde estén sus hijos y su esposo. Y, aunque ahora ella no esté más en esa casa, su sueño sigue siendo realidad. Él está ahí con sus hijos.— el actor se sentó al borde de la cama— Si no les hubiera mentido, ese hogar hubiera perdido el sentido para ella. 

— Tarde o temprano lo hará, ¿no?

— Realmente no lo sé . Espero que no.— hizo una mueca—Pero bueno, Will, ponte cómodo.  

2014

Narrador 

Casi todos los actores y encargados de la escenografía, vestuarios y luces se movían de un lado a otro. En tan solo una hora iniciaría la primera función de Coriolanus, así que algunos tenían los nervios de punta. Aunque, los intérpretes principales lograban mantenerse tranquilos, habían hecho aquello tantas veces que confiaban en sus habilidades plenamente; aun así, algunos tenían rutinas antes de salir a escena. 

Tom escuchaba música con sus audífonos mientras imaginaba en su mente todos los actos, hacer eso lo ayudaba a relajarse mientras era consiente de lo próximo que tendría que hacer. Pero, a comparación de anteriores obras, se sentía más confiado de lo normal. Habían practicado muchas veces, tanto las coreografías de pelea como los diálogos, y aunque algo saliera mal, estarían los hermosos ojos de Sofía en todo momento para que lo inspiraran si tenía que realizar una improvisación. 

Ella se mantenía tranquila, sentada en el suelo mientras cargaba su celular. Se había encontrado con las personas que la querían esa mañana, por lo que estaba emocionada por actuar para ellos. Además, Robert y Johnny estaban ahí, era momento de demostrarles lo mucho que había mejorado su técnica tras dos años en RADA. Ambos habían sido sus mentores en los proyectos que compartieron, quería hacerles saber que todos los conocimientos que ella rescató de sus trabajos habían formado lo que era ahora, y que sin su apoyo tendría el talento con el que contaba en aquel entonces. Su personaje no era de los principales, aun así tenía pensado resaltar con las pocas líneas que tenía en solitario. 

Somebody to love [Tom Hiddleston y tú]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora