Capítulo #21:

346 49 4
                                    

Capítulo #21: "Boda Doble I"

Charlotte

Nos acostamos tarde por lo que me quede dormida más tiempo de lo necesario. D no está a mi lado. Así que suspiro nerviosa.

¿Se habra arrepentido de casarse conmigo?

Pero al dirigir la mirada a la puerta del baño y verlo apoyado contra está mirándome directamente, supe que no era así.

Seca su cabello con la toalla meneando y tensando cada músculo de sus brazos al hacerlo. Su cuerpo está bien marcado, sus abdominales y la V que se forma en la parte baja de su cuerpo me llaman a tocarlas. Solo la parte más importante de su cuerpo está cubierta y mientras estoy mirándolo el sonríe triunfante.

— ¿Te gusta mirar o prefieres tocar? — pregunta y explico con mis dedos que las dos – Y ¿el labio mordido es para siempre?

Bueno, no me había dado cuenta de que estuviera haciéndolo, pero aún cuando me reclama no dejo de hacerlo.

Se acerca a mi y el cabello rojo cae por su rostro y sonríe para mi, quito la ligera barba rojiza que crecía en su mentón. Incluso incluye el olor a loción todavía.

— Tenemos que hacer muchas cosas hoy, sino no te levantarías de la cama en todo el día — asentí, estoy anonadada, prefiero no hablar para no perturbar la maravillosa vista que tengo en frente.

Me ayuda a poner de pie y mi cuerpo descubierto se siente frío lejos de la sabana y comienza a erizarse, o esa es la justificación que preparo, porque con coló como me está mirando siento un escalofrío recorriendo todo mi cuerpo.

Entro en la ducha y el espejo está nublado, puedo sentir el vapor en todo el baño.

(...)

Salgo de baño después de una larga ducha caliente, con el cabello aún mojado.

— Podría vivir con esta vista — dice D acariciando mi mejilla — Enzo tendrá un día muy ocupado junto a Emily, Nicolas y Carlos.

Asentí. Me vestí con una bata blanca y recogí mi cabello mojado.

— Paula y Lauren están esperando para entrar, ¿las dejo entrar?

— Si, por favor mi ángel.

— Te amo, muñeca — sus palabras salen de su boca y me siento sobre una nube, sonrió, sin poder evitarlo, lo observo y el a mi.

— También yo — confirmó sus sospechas y sonríe.

El sale de la habitación y segundos delires entran Anna y las otras dos.

— Tenemos un regalo para ti – avisa Lauren.

— Que conste que es MI regalo — enfatiza Paula.

— Aburrida — le dice Anna acariciando su panza.

— ¿Qué es? — pregunté feliz.

— Ah, perdón — dice Lauren — Felicidades, ya D nos contó.

— Si, Felicidades linda — se incluye Anna.

Esta claro que de Paula no se puede esperar eso.

— Bueno ahora mi regalo — dice con molestia esta última.

— ¡Si! — pedí feliz.

Ella abre una caja hermosa, que lleva un lazo morado encima.

— Es hermoso — digo cuando veo el vestido, ese vestido blanco.

Déjà VuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora