Capítulo 10. Mentira

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Lloré en los brazos de Raúl sin medida, me acompañó a la farmacia y tomé el medicamento, me dejó en el departamento antes de marcharse, la casa estaba sola, me sentía vacío, aunque una noche antes me sentía en el cielo, ahora estaba en las puertas del infierno, suspiré pensando que podía hacer de ahora en adelante?.

Estaba enamorado, no había duda en ello, pero tampoco había duda, en el hecho de que quizá, el no me amaría jamás.

Me metí en mi habitación poniendo música, el timbre sonó, abrí viendo a Chris y Mila, ella me abrazó dándome un golpe en mi cabeza, me sobe fingiendo que me había dolido - Idiota estuvimos preocupados - yo correspondía a su abrazo, agradecía haber tomado un nuevo baño, Raúl me dijo que ya no olía al azabache, su hermano me veía demasiado - Perdoname pequeño soy un idiota, debí cuidarte mejor - lo abracé diciéndole que era mi hermano favorito, llevaron carne con queso, y unas cuantas cervezas, odiaba esa bebida amarga, ellos lo sabían, me llevaron una bebida dulce con un poco de alcohol como me gustaba, pusieron música mientras Chris se quejaba de haber sido rechazado por un omega presuntuoso, ellos eligieron escuchar música de los tiempos pasados, esa música que escuchaban mis padres, ellos decían que era lo mejor para sincerarse.

Después de un par de canciones de Juan Gabriel, ella se había sincerado con nosotros - Es horrible darme cuenta como los hombres mueven su cola como perros en cuanto encuentran algo que les gusta, hubieran visto a mi novio se le caía la baba con esa mujer, no es la primera vez que lo veo así, es amable, es instruido e interesante, qué le cuesta ser fiel?.

- Ya te lo dije hermana, no confíes en ningún hombre, todos somos una basura, ni todo el amor ni todo el dinero.

- Cómo. puedes decir que todos los hombres son iguales?, no puedo decir que todos son hombres malos, cuando he conocido el amor más sincero en los brazos de mi padre, de mi abuelo, en los tuyos que eres mi hermano, no me pidas eso - ella tenía razón, el era un hermano amoroso, Gabriel un padre protector, porqué debemos bajar nuestras esperanzas cuando hemos conocido a un hombre así en nuestras vidas?.

- Ningún hombre te amará tanto como un padre - interrumpí su conversación, ellos me miraban contrariados, era verdad yo me crié en las calles, era huérfano, pero había una excepción - Gabriel no es mi padre, todos lo sabemos, pero me ha amado aún sin serlo, me vistió, me arropó, me cuidó cuando estaba enfermo, gastaba dinero y tiempo en mi cuando podría estar comprándose lo que más le gustaba o estar solo sentado sin preocuparse por nada, si eso no es un amor sincero dime qué puede serlo? - ellos me dieron la razón, metí un poco de carne a mi boca cuando Christophe dijo algo que casi me hace atragantarme.

- Si quieres a Gabriel como un padre, porqué no quieres a Otabek como un hermano? - Mila lo miró, agradecía que ella estuviera presente, esperaba que le diera un golpe para callarlo. como siempre, pero no fue así.

- El corazón no elige a quien querer, es verdad, pero Yuri, no has pensado en darte por vencido?, cuando te miré bailar con un desconocido me sentí muy feliz por ti, porque si el no va a corresponderte quiero que seas amado por alguien que si pueda.

-Como va a corresponderle Otabek si el no sabe lo que Yuri siente por el? , no seas tonta.

- Crees que no lo sabe?, después de todos estos años, es obvio que lo sabe Christophe, Otabek no es ningun idiota, solo sabe fingir que lo es.

- Me estas sugiriendo que mi amigo no tiene las bolas para rechazar a Yuri directamente?.

- No lo estoy sugiriendo hermano mío, lo estoy afirmando - me reí por su comentario, cambie la música, poniendo a todo volumen El hombre que yo amo, Mila cantaba conmigo, mientras Chris se destapaba otra cerveza, estaba cantando el coro cuando el azabache entró, con cara de fastidio, caminó sin siquiera saludar para quitarle la lata que el contrario tenía - Llegaste a buen momento amigo, se ve que tienes sed de la mala, que te pasó? - el suspiró antes de seguir tomando - No quieres saberlo - contestó.

Mi Único AmorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora