Sus intenciones

1.5K 184 33
                                    

Tomo la decisión tan rápido que pudo sentir la descarga de adrenalina recorriendo su cuerpo impulsando una carrera por el pasillo, tenia que ser libre tenia. . .

-Si intentas escapar solo te lastimaras - resonó la voz de Min deteniéndolo a mitad del pasillo.

La puerta de su despacho se encontraba abierta y podia ver desde donde se hallaba que ocurría afuera, Jin se detuvo en seco apenas escuchar su voz; ¿era por que la voz que el alfa habia impuesto sobre de él era su voz de mando?, sintió sus piernas temblar. ¿Cómo era capaz aquel hombre de imponerse ante él?

-Vamos entra - ordeno Yoongi.

Volteo a mirar el pasillo extendiéndose delante de él  y a los pocos pasos unas escaleras, la libertad estaba ahí a escasos metros de él, pero su lobo lo obligo a entrar a donde el alfa esperaba su visita detrás de aquel escritorio de madera donde tecleaba rápidamente sobre una computadora, misma que dejo de lado una vez que Jin se planto delante suyo.

Su maldito lobo debía de estar calándole una broma, no tenia sentido que quisiera entrar ahí, que las palabras de Min tuvieran tal efecto sobre de este.

El olor a café inundo la estancia, ¿acaso estaba tratando de calmarlo? Por que si era así estaba dando resultado.

-Toma asiento - señalo el alfa un sillón frente del escritorio, Jin negó con la cabeza, esa orden si la pudo pasar por alto - Primero que nada y que te sueltes a llorar, gritar y pidas clemencia. No te pienso hacer daño, abusar de ti o cualquier aberración que este pasando por tu cabeza. Solo tienes que tener en claro una cosa, serás mi esposo.

¿Esposo? Él ya estaba casado con Taehyung, aquello en verdad parecía sacado de una novela o de un loco sueño. ¿Cómo es que iba a casarse con aquel alfa?

-Como mi prometido - continuo Min - tienes derechos, puedes darle ordenes a los empleados, andar por la mansión y mover en ella lo que te parezca o pedir que compren algo que creas necesario, puedes salir al jardín, pedirme lo que desees, se libre de hacer lo que te plazca. Pero por todo ello existen un par de restricciones que debes de obedecer y si con el paso del tiempo te acoplas las levantare. Primero no puedes usar el celular o teléfono para comunicarte y segunda no puedes salir a la calle. Si intentas gritar por ayuda o utilizar alguna treta para hacerlo. . .

-Me castigaras - completo Jin en un susurro.

Min Yoongi lo miro sin expresión alguna, sus finos ojos lo atravesaban de tal manera que el omega tuvo el impulso de taparse o esconderse de este.

-No, no abra castigos, pero si te reduciré la libertad. Lo ultimo que quiero es escucharte gritar y que de algún modo te lastimes. Tienes una vida en tu interior, recuerda eso cuando pretendas escalar las rejas o saltar por alguna ventana.

Por instinto Jin se llevo las manos a su vientre y lo acaricio, eso de escapar por las ventanas no estaba en sus planes, por lo menos no por ahora.

-Ahora bien, si necesitas algo dilo, si no me lo dices a mi que sea a Woozi, él conseguirá lo que quieras y estará contigo todo el día, ya que yo trabajo y no puedo estar contigo, solo los fines de semana los cuales utilizaremos para conocernos y tal vez salir.

Todas aquellas palabras sonaban desconocidas para Jin. Además cómo podia hablar tan calmado, después de lo que fuera que le habia dicho a su Taehyung para convencerlo de pagar con él.

-¿Tae? - pregunto sin evitarlo -¿él . . . que paso con él? ¿Lo dañaste?

-¿Dañarlo? - pregunto extrañado el alfa - piensas que soy un monstro que lo mando desaparecer al otro lado de mundo. Kim Taehyung es todo menos la victima en esta situación.

Solo JinDonde viven las historias. Descúbrelo ahora