JoelÉl definitivamente no podía permanecer tan tranquilo, era por completo imposible. Sabía que esto iba a ser difícil, que habría todo tipo de persona y que por supuesto los ojos del cien por ciento de los presentes, estarían sobre un mismo individuo sin embargo no contaba con que su enojo crecería conforme pasaran los minutos, no...no contaba con que ahora estaría a punto de patear a ese idiota de Camacho en su perfecto rostro y es que...¡Joder! Él tipo tenía las manos sobre su chico, sobre su Erick y eso era más de lo que su estado mental podía soportar.
El desfile fue increíble, la ropa era exquisita y la puesta en escena del show, a pesar de ser en un salón privado y pequeño, no tenía absolutamente nada que envidiarle a las grandes pasarelas. Los asistentes aplaudieron cada pieza, halagaron a cada modelo que lució las telas que conformaban aquellos diseños atrevidos, el público realmente estaba sumido en el desfile y por los rostros y gestos, aceptaban con muy buenos ojos lo que veían pero Joel quería salir de ahí, quería salir de ahí con Erick de la mano y no le importaba si tenía que arrastrarlo para eso, no... él ya no tenía sensatez alguna porque se había hartado de mirar como el tal Richard lo sostenía como premio al final del evento.
-Creo que debes relajarte. -Joel casi pega un grito al escuchar la voz de Christopher, él ni siquiera recordaba que el chico estaba ahí. Había estado tan sumido en su propia miseria que se sintió ridículo cuando volteó a mirarlo.
-¿De qué hablas? -No quiso sonar grosero, tampoco era su intención que la voz le saliera rasposa y grave pero en su defensa, llevaba alrededor de una hora filmando y fotografiando el evento, suficiente había aguantado.
-Estás super tenso, se te nota a kilómetros y se que tienes ganas de golpear a Richard, no intentes negármelo.
-¿Perdón? -Joel lucía genuinamente sorprendido y Chris suspiró antes de responderle, sabía que el rizado no tenía idea de que ya Erick le había contado todo y eso le daba pena, pena por Joel.
-He estado todo el tiempo justo aquí, he visto como tu cuerpo se tensaba cada vez que Erick tenía que desfilar, he visto como...bueno...como...
-¿Cómo qué? -El de lentes dió un respingo, Joel estaba muy serio, demasiado y eso no lo hacía sentir cómodo en absoluto, no cuando tenía miedo de meter la pata.
-Hola Christopher. ¿Qué te ha parecido? Debo decir que tu chico es mucho mejor de lo que esperaba. O sea... sabía que era muy bueno pero verlo en acción no se compara con nada.
Y si como si Chris no hubiese estado ya lo suficientemente nervioso, resulta que ahora el diseñador se había dirigido a ellos, interrumpiendo de una vez lo que sea que estaba pasando. El hombre tal vez no se percató de la mirada asesina que le dió Joel y hasta cierto punto lo agradecía pero eso no evitaba que de repente el ambiente se cargara con una energía que rozaba la temperatura de congelamiento. El rizado estaba prácticamente aniquilando al pobre hombre que no tenía culpa de nada. El de lentes sonrió tímidamente, la verdad era que no sabía que podría pasar si Joel explotaba.
-Me ha encantado, señor Camacho. Ha sido un desfile increíble y tiene mucha razón, Erick ha brillado. -Chris realmente lo creía, él era plenamente consciente de lo fabuloso que era su amigo en su trabajo y es por ello que sonrió al decirlo sin embargo el rizado lucía cada vez más descompuesto.
-No me llames señor, me hace lucir mayor y aún no cumplo los treinta. -El moreno le dió un pequeño guiño, Christopher casi se atraganta con su propia saliva, el diseñador le estaba coqueteando, en realidad le estaba coqueteando y él simplemente estaba rojo como un tomate.
-Bue...bueno. -Tartamudeó como adolescente enamoradizo frente a su primer crush y por unos segundos se olvidó de que su corazón ya tenía dueño, un dueño que no le correspondería jamás pero no podía evitarlo, había amado a Zabdiel durante algunos años y...
-¿Te gustaría tomar una copa después? -Bueno...eso no estaba en planes y ahora si que los nervios lo atacaron. Joel lucía incrédulo a su lado, aliviado de que el moreno presentara su atención al de lentes, así que en vista de que Christopher había quedado mudo, decidió actuar, era su oportunidad para quedarse solo con Erick, al menos tenía esa esperanza.
-Creo que estaría muy a gusto. ¿Verdad Chris? -Intervino al fin y de esta manera captó por primera vez la atención de Camacho que volteó a mirarlo enseguida.
-¡Oh! Perdón, no me había percatado de usted. ¡Qué vergüenza! Soy Richard. -Extendió su mano hacia el rizado en gesto de saludo cordial y fue un alivio saber que Erick no era su objetivo. No habría podido soportarlo.
-No hay problema, mi nombre es Joel Pimentel, soy...el periodista encargado de documentar a Erick para la mini serie. -Le habría gustado decir que era su novio, su amante, su dueño, cualquier cosa que no fuera un simple idiota con cámara en mano pero estaba consciente de lo ridículo que era solo pensarlo.
-¡Wow! Entonces lo dejo en buenas manos. Voy a llevarme a Chris, Erick está en camerinos, recién estaba conmigo y me dijo que iría a cambiarse. Está cansado, así que seguro viene pronto. ¿Podemos confiar en que lo llevarás al hotel? -Joel estaba algo desconcertado, Richard hablaba rápido, al parecer quería ese tiempo a solas con el de lentes y aunque aún no sabía si era una buena idea del todo pero si que era una oportunidad para estar con Erick...a solas.
-Si...lo haré. -Respondió serio, el de lentes le regaló una mirada extraña, era como si tuviera muchas cosas que decir y no se atreviera a hacerlo sin embargo lo hizo antes de que el moreno lo impidiera.
-Solo...cuídalo. ¿Si? Hoy está sensible y tal vez no sea la mejor compañía para nadie pero...no lo dejes solo. -Chris se separó un poco e hizo una seña para indicarle a Richard que esperara, cuando estuvo lo bastate lejos como para que solo Joel escuchara, volvió a hablar. -Se lo que pasó y no quiero ni juzgarte ni nada por el estilo, realmente creo que tú sientes mucho más de lo que admites pero entiende a Er, solo...quédate con él, cuídalo hoy y aunque se vuelva una cosita ácida...no lo dejes solo, no hoy.
Joel podía decir que su mente hizo un cortocircuito en el preciso instante en que las palabras del castaño salieron de su boca, él no había sido capaz de responderle, ni siquiera creyó posible hacerlo aunque lo hubiese intentado y no fue hasta que se dió cuenta de que estaba ahí solo, que comprendió lo que el chico le había dejado caer. Chris sabía, sabía que entre Erick y él habían pasado cosas y eso lo ponía nervioso, terriblemente nervioso, expuesto y vulnerable porque al atar cabos llegaba a la conclusión de que si el de lentes lo sabía era porque el ojiverde le dijo.
-¡Jodida mierda!
Exclamó en un suspiro mientras pasaba una mano por su rostro, no pensó jamás que estaría en esta situación, no creyó que su secreto más profundo estaría expuesto, en realidad no pensó que Erick lo contraría. ¿Por qué lo había contado? Él sabía que el niño no lo quería, se lo dejó más que claro aquella mañana en que rompió su corazón, esa jodida mañana en que su mundo se quebró en pedazos y entonces...¿Qué pasaba? ¿Acaso el ojiverde se lo dijo a su mejor amigo porque sentía culpa? ¿Sería porque estaba asquedo de Joel y por eso no aguantó? Joel quería llorar, estaba sintiendo todo congelarse a su lado hasta que una idea le vino a la cabeza, si Erick le había contado a Chris solo porque sentía rechazo a Joel...¿Por qué Christopher le había pedido tan seriamente que cuidara del niño? ¿Por qué le había casi rogado que se quedara con él? No pudo responderse a sí mismo, no tuvo oportunidad porque sus enredados pensamientos se vieron interrumpidos por la voz más dulce que había escuchado.
-Chris me envió un mensaje...ya se que me dejó solo, estoy listo para que me lleves al hotel.
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Behind your eyes ll Joerick
FanfictionErick es un reconocido modelo de alta costura, acostumbrado a las pasarelas y las cámaras, es lo que se puede decir...un engreido de primera categoría pero vamos...es Erick Brian Colón, obviamente tiene de donde creerse. Joel es un periodista gradua...