Estábamos todos en la habitación, había un silencio demasiado incómodo.
Tragué saliva. — Benja, mira mi peluche. — Sonreí y le mostré el peluche a Benja.
Benja comenzó a ladrar.
— Calla ese maldito perro. — Dijo Benjamín, sin poner ninguna expresión.
— No le dig-
— Le puedo decir cómo se me de la gana, ¿y qué? — Interrumpió.
La forma en la que me miraba daba mucho
mucho miedo— Sosteila, salgamos con Benja afuera. — Dijo Alexander.
Mire a Benjamín, ahora tenía el ceño fruncido.
Rasque mi cuello.
— Voy a ir al baño. — Tragué saliva, me pare de la cama y fui al baño.
Cerré la puerta del baño y me lave la cara en el lavamanos.
Tocaron la puerta.
— ¡Ya voy a salir!
Tocaron más duro la puerta.
La abrí. Era Benjamín, su mirada me daba escalofríos.
— Ho-Hola. — Tragué saliva.
Agarro mi cara y...
¡¿?!¡ME BESO!
Mis ojos se pusieron más grandes que mi cabeza, en cualquier momento se saldrían.
Se separó de mí, ¿y yo? Bueno, yo estaba paralizada, parecía una estatua.
— ¿Debería terminar contigo? ¿Qué debería hacer contigo? — Puso una mano en su frente, cerró sus ojos y suspiró.
No sabía que decir, seguía paralizada.
— Odio a Alexander.
Tragué saliva. — ¿Por qué?
— Quiere estar contigo, no entiende que eres mía. — Frunció el ceño.
Tragué saliva de nuevo.
— No soy un objeto.
Apretó sus puños, y, bueno, ahora sí estaba endemoniado. — No se si sepas pero.. Si dos personas son pareja no deben tener más novios o más novias, tampoco deberían dejar que una persona se interese en ti, eso solo demuestra que no estás solamente enamorado de una persona. — Frunció el ceño. — Si no te gusta como pienso deberíamos terminar, no pienso estar con una persona que no piense como yo.
Fruncí el ceño. — ¿Entonces que quieres? ¿Quieres que trate mal a Alexander? ¡Eres un idiota!
— Si eso hará que deje de estar interesado en ti.. Hazlo, o terminamos.
— Entonces terminamos. — Salí del baño.
Esto debe ser una broma.
— Entonces vive en la casa de Alexander, no deberías dormir en la casa de tu ex novio.
Apreté mis puños. — Viviré en la calle si es posible. — Seguí caminando.
Me detuvo.
Agarro mi mano y me tiro contra él. Después de eso me abrazo, me abrazo con fuerza.
— Mierda.. — Murmuró.
— Déjame — Tragué saliva.
— Perdón. — Me abrazo con mucha más fuerza.
— Benjamin, déjame. — Fruncí el ceño.
— Solo déjame hablar, ¿si? — Suspiró.
— No, déjame. — Comencé a moverme.
— No quiero dejarte, solo me da mucha rabia cuando te veo con alguien más, siento que te vas a ir de mi lado, no quiero ver como alguien más te abraza, no quiero ver como sonríes con alguien más. Perdón por ser egoísta, solo quiero hacerte feliz, pero no quiero que otra persona que no sea yo te haga feliz.
Tragué saliva. — ¿Estuvo bueno el helado de ahora?
Sonrió. — No.
— Ah..
— Me gustaría solo si lo comiera contigo.
— Estás mintiendo.
— Claro que no.
— ¿Y la chica de hora? ¿Sí estaba buena?
Soltó una pequeña risa. — Sí.
— Suéltame
— Sosteila
— Dije que me sueltes.
— Quédate cinco minutos así, después puedes irte con Alexander.
— ¿Por qué me iría con Alexander?
— Ahora lo hiciste.
— Fue porque nunca jugué con el en un parque de diversiones.
— ¿Y conmigo si?
— Sí.
— Puf. — Comenzó a dar besos en mi cuello. — ¿Entonces como ahora te di un beso también vas a dejar que Alexander te de uno ya que nunca lo dió?Sentí como 20 escalofríos.
Sonreí. — Sí.
— Idiota.
ESTÁS LEYENDO
Miradas con el chico raro
Storie d'amoreღ - ¿Escucharon el dicho "entre más lo miras más te gusta"? Bueno, yo solo quiero decir que es real.