METEOROS EFÍMEROS © #1 [TRILOGÍA SIEMPRE POR LAS ESTRELLAS]

Capítulo 71

<<Tears in Heaven (Eric Clapton)>>

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Pasa solo media hora, y el cuerpo de la muchacha sigue desprendiendo un olor demasiado fuerte. En el hospital del edificio examinan y vigilan sus vías respiratorias, la respiración y su pulso es lo más importante. Según uno de los análisis que ha hecho uno los médicos que trabaja en ese centro, la paciente había sido envenenada con Ricina. Se trata de una proteína altamente tóxica que se produce naturalmente en la planta de aceite de ricino. Es venenosa para los humanos si se inhala, se inyecta o se ingiere, y una dosis del tamaño de unos pocos granos de sal de mesa puede matar a una persona adulta. Lo único que quiere decir es que es indudablemente muy peligroso.

La única pregunta que tiene Nathan —el tutor del grupo B— es si podrían curarla.

El médico duda unos segundos en darle una respuesta certera. Todo porque la Ricina evita que las células combinen los aminoácidos que reciben de los ribosomas de la célula para crear proteínas. Y esto es esencial para todas las células vivas, por lo que, sin él, las consecuencias no son demasiado fabulosas. Los síntomas causados por la falta de proteína después de recibir una dosis de ricina suelen ser diarrea severa, y algunas víctimas pueden morir de shock. Otros efectos van desde convulsiones hasta hipotensión —presión arterial anormalmente baja— sin embargo, la muerte generalmente ocurre después de aproximadamente tres a cinco días de exposición.

—Eso quiere decir que tiene una mínima posibilidad, ¿verdad?

Como respuesta solo se aprieta los dientes. Se marcha sin decir nada, mientras Nathan se queda mirando el cuerpo, preguntándose como había podido llegar el veneno hasta el comedor.

La ricina es un veneno que puede elaborarse a partir de sobrantes del procesamiento de las semillas de la planta de ricino. Puede estar en forma de talco, vapor o grano o puede disolverse en agua o en un ácido débil. Lo curioso es que, en esa universidad tienen un pequeño invernadero, en dónde solo los profesores y el director tienen acceso. Y es imposible que el resto de tutores hubiese planeado algo así. Victoria y Susan jamás harían algo así para herir a los alumnos, es cierto que les llaman la atención y los regañan cuando deben. Y también está seguro de que nunca les haría algo malo a los suyos o a los de Jordan. Este último siempre anima a los estudiantes, no tiene un móvil obvio para cometer ese acto tan horrible.

Nathan se desaliña el pelo, y sale de la sala, para ir al servicio. En ese descuido, alguien se cuela en la habitación. Se acerca a la cama en donde está Amber tumbada, estira las palmas de sus manos y las comienza a mover por encima del cuerpo de la muchacha, sin hacer contacto directo. Un polvo azul púrpura con destellos amarillos rodean el cuerpo de la hospitalizada. Las quemaduras que había alrededor de su boca desaparecen, sus mejillas vuelven a coger color.

La persona que se ha colado en la sala posa su dedo índice debajo de las fosas nasales de la paciente, respira. Además, el olor a químico ya no se siente.