METEOROS EFÍMEROS © #1 [TRILOGÍA SIEMPRE POR LAS ESTRELLAS]

Capítulo 6

Mención especial a Angelasai01  Por alegrarme y aguantar todas mis disparatadas ideas, desde DOBLE IDENTIDAD, hasta IRIDISCENTE. Gracias por ser una de mis primeras lectoras y animarme en cada capítulo. Sé que hasta que no termines los exámenes no verás esto. ¡Mucho ánimo, que ya llega Navidad!  ❣️❣️

<<Time to love (October)>>

☆☆ 6 ☆☆

Las amigas de Nirali ya han visto la mayoría de las instalaciones. Todo el edificio en sí les parece impresionante. Como para no, es gigantesco.

—Viéndolo de esta manera, —Lillian comienza a hablar— tener este pedazo de edificio más todos los lujos que hay incorporados en este, me parece incluso mejor que el antiguo campus.

—Por supuesto que es mejor —confirma Aria—. No hay que compartir espacio con gente que me cae mal ni me mira mal.

—Tú tampoco es que mires genial a todo dios, Aria —ríe Caye.

—Es la mirada que tengo, tía —se le escapa una pequeña risa y cambia de tema sin pensarlo—. Y os habéis fijado en los seis guaperas que tenemos como compañeros, ¿verdad?

—Como para no fijarse —Val se cruza de brazos y suspira—. Eran todos guapísimos.

—Eran monos —afirma Caye.

—Tú ya estás casi casada —replica Aria.

—Eso no quiere decir que no pueda opinar al respecto.

—Touché.

—¿Qué hay de ti, Valeria? —Pregunta Lillian—. ¿Tienes pareja?

—Tuve novio —les dice en un tono más amargo—. Lo nuestro no tenía futuro, no era una relación sana.

—Eso es, las relaciones que quiten la paz mental, fuera —Aria intenta subirle los ánimos.

—Todo se lo debo a Nirali, y a otra amiga, —añade— ellas me abrieron los ojos, pero sobre todo a Nirali —remarca—. Yo sabía que era una relación tóxica, más, sentía que perdía una parte de mí, si le dejaba marchar. Siempre que me sentía triste, Nirali me marcaba y hacíamos videollamadas. Me explicaba que haría ella si estuviese en mi situación. No obstante, y como es lógico, la última palabra la tomaba yo. Y tras mucho pensarlo, recapacité.

—Ella es borde y algo brusca, —Lillian se acerca a ella—. Sin embargo, siempre puedes contar con ella para los temas importantes.

—Lillian tiene razón, —agrega Caye— nunca sabes por dónde te va a salir, tan rápido puede despertarse y meterte un puño, como darte un abrazo. Más siempre está ahí. —Mira a Aria—. Ni se te ocurra ponerte celosa, que te veo venir.