Capítulo 49

1.5K 215 149
                                    

<<Chandelier (Sia)>>

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

<<Chandelier (Sia)>>

☆☆ 49 ☆☆

Infinidad de gente ha salido del recinto: familias, parejas, adolescentes... Mientras que Nirali se ha metido en la boca del infierno, una multitud de llamas comienzan a expandirse por todo el parque. El cielo se va contaminando, partículas de calor, combustible dañan el oxígeno.

—Cómo esto siga así, olvidaos de volver sanos y salvos —Lillian comienza a toser.

—Calla, intenta ahorrar oxígeno —sisea Caye—. Además, mi habilidad es el agua, no hay fuego que pueda resistirse.

—Y la nuestra la nieve y el granizo —añaden los mellizos Moon.

—Apenas sabemos utilizarlas —recalca Val—. Y sí, digo sabemos, porque ni yo sé dominar del todo la mía.

—Nosotros hemos estado practicando en casa —tose Austin.

—Casi destrozamos el jardín, eso sí —agrega Justin.

—Lo mismo digo —carraspea Caye—, quitando lo del jardín.

«Yo he ahogado a las flores del balcón y por poco le tiro una maceta a un paisano que pasaba por la acera.»

Los tres procuran concentrarse para controlar el flujo de sus poderes. 

Fallan, los mellizos Moon no consiguen crear nada a derechas. Caye consigue crear varios chorros de agua, que por desgracia no sirven.

«Imposible, todo el mundo sabe que el fuego se extingue con el agua.»

«Este no es un fuego normal y corriente.». «Si Caye no ha podido apagarlo, quizá se trate...» June mira a Nirali quién está boquiabierta observando el espectáculo de llamas. «¿Quién podría haber hecho esto?»

—Nirali, ¿crees que puedes crear, no sé, un vórtice o algo que absorba todas las llamas?

—Tú has visto demasiadas películas —frunce el ceño—. Te recuerdo que soy la que peor dominio de habilidad tiene —dice—. No me pidas imposibles.

Se acerca a su lado, le toma el rostro con delicadeza forzando a mirarle a los ojos y rozar narices, como de costumbre. 

—Si no lo haces, te beso —suelta sin apartar sus ojos verdes de los suyos—. Y no creo que después de haberte besado con Snio, quieras probar mis labios.

«¿Nos ha visto?», lo empuja para tomar distancias de nuevo.

—Imbécil.

—Confío en ti, Bruni.

Aquellos ojos verdes muestran sinceridad absoluta.

Nirali sabe que debe hacer algo, sin embargo, como ha mencionado, no sabe controlar su don. Algo se vuelve a apoderar de ella, al igual que ocurrió en su enfrentamiento contra Belle. Este la impulsa a colocar sus manos extendidas con los dedos bien estirados. Un gran aro del mismo elemento se crea ante todos ellos y absorbe gran cantidad de fuego. 

METEOROS EFÍMEROS © #1 [TRILOGÍA SIEMPRE POR LAS ESTRELLAS]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora