27. Encuentro incómodo y retirada (pt. 2)

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Brandon y yo corrimos de vuelta al almacén principal donde aún sonaba la alarma. Mediante un extraño e improvisado lenguaje de señas decidíamos qué camino tomar. Estábamos prácticamente perdidos hasta que vimos un águila sobrevolando los estantes. Rápidamente aterrizó y se transformó en un par de animales más antes de convertirse en humano.

Eagle gritó algún tipo de explicación sobre su desaparición junto con el resto del equipo, pero ni Brandon ni yo escuchamos lo que dijo. Nos hizo una seña para que lo siguiéramos y eso hicimos.

Nos encontramos con varios grupos de guardias corriendo organizadamente en los pasillos, pero logramos esquivarlos sin problemas. Las cajas enormes ayudaban a escondernos.

La alarma de pronto se apagó, dejando un sonido residual en mis oídos, como un ligero timbre. Nos detuvimos en seco. Miramos a nuestro alrededor en busca de señales de que nos tenían acorralados, pero no había nadie.

—Michael la desactivó —dedujo Eagle. Su voz se escuchaba extraña siendo amortiguada por el timbre en mis oídos. —Intentamos encontrar alguna sala de control o tal vez una oficina de gerencia de este lugar. Pensamos que ustedes nos comprarían más tiempo.

Recargué mis manos sobre las rodillas para descansar un poco.

—Oh, no. Había demasiada tensión sexual entre Brandon y Jack. No es una experiencia que deseo repetir ni aplazar más de lo necesario.

—¿Consiguieron algo de información al menos? —inquiero Eagle.

Le explicamos la poca información que conseguimos: incluso aunque nos atraparan, no iban a matarnos porque tenían órdenes de un trío de personas demasiado poderosas para desobedecerlas. Brandon comentó que nos habían brindado esa información demasiado fácilmente.

—Entonces ellos querían que supiéramos quién los envió —adiviné.

—O sus jefes son tan poderosos que no les importa hacer pública su identidad —sugirió Eagle.

—De cualquier manera, los guardias tienen poderes y no son de la AAD —recordó Brandon—. Saben dominarlos lo suficiente para pensar que no aprendieron solos. Alguien les enseñó.

—¿Estás diciendo que existe otra academia? —pregunté.

—Tendría sentido —apoyó Eagle—. Es ingenuo pensar que la AAD es la única academia de magia en el mundo. Somos miles de personas con poderes, a alguien más debió habérsele ocurrido crear otra academia, ya sea porque no sabía de la existencia de la AAD o porque deseaba su propia academia.

—Si ese fuera el caso, ¿por qué la AAD no nos diría nada? —cuestioné—. Deberíamos tener competencias de magia entre academias y cosas así, o al menos saber de la existencia de otros lugares llenos de personas con magia.

—¿Competencias de magia? —preguntó Brandon, extrañado.

—Sí, como en Harry Potter. ¿No han visto la película?

—Leí el libro. —Eagle se encogió de hombros.

Me reí y le di una palmada en el hombro.

—Libros de Harry Potter. Qué buen chiste.

Ambos chicos me dirigieron una mirada insegura, como si se debatieran por decirme algo. Después hubo una época en donde tuve mucho tiempo para leer y ahora sé que originalmente Harry Potter es un personaje de libro, pero antes no tenía idea de que muchas películas estaban basadas en libros. Decidieron olvidarlo y regresar al tema.

Anormal | 1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora