Mustelidae

Semana interminable

Jueves

La noche había sido larga, no había duda de ello. Casi no había podido dormir y aún podía sentir la calidez al lado de la cama, a pesar de haber cambiado las sábanas, a pesar de voltear el colchón y rociarlo con su perfume, aún podía sentir su aroma, su tibiez y para peor de males, si se concentraba mucho, lo podía ver.

A las 4 de la mañana ya estaba despierta, entrando al baño para darse una ducha muy fría y vestirse con una falda tubo negra y una camisa verde bosque manga ¾. Unos tacones no muy altos con punta redondeada; peinó su cabello en un coleta alta, dejó su flequillo suelto. Al verse en el espejo sonrió. Lucía mucho más guapa ahora que en su tiempo de colegiala, además, la confianza interna ahora reinaba en su autoestima, algo que no la caracterizaba en el pasado.

No tenía apetito, así que su desayuno fue un plato con yogurt y cereal. Nada parecido a sus desayunos habituales.

Seguro si se iba a esa hora al ministerio le dirían que era una obsesiva, una enferma por el trabajo, así que esperó unos minutos más, cinco para ser exactos y tomó su sobretodo para irse. Llegaría directamente, así evitaría comentarios y miradas de asombro al verle antes del amanecer. Pero es que realmente, no quería estar en su casa. Todo era más difícil si veía su cocina, su baño, su cama, toda la puta casa le traía recuerdos que no quería tener en su mente.

- Buenos días, señorita – le saludó Claire a las 8 en punto. Esa mujer era la puntualidad hecha humana, solo sobrepasada por su jefa. Hermione le sonrió gustosa e invitó a pasar.

- Buenos días, ¿Qué hay para hoy? – Preguntó con cordialidad.

- Muy bien, el señor Malfoy ha mandado un informe detallado de todas las observaciones que ha hecho al proyecto. – Hermione tensó todo su cuerpo al escuchar ese apellido. Siguió mirando a Claire y tragó con dificultad, estaba pensando en colocar una pequeña cosecha de vino en su oficina para momentos como ese, tenía la leve sospecha que lo necesitaría. – El ministro ha indicado que la gala del colegio será para la semana que viene, debido a un compromiso que tiene en Rumania el mes próximo y por lo cual no podría ir a la presentación de su proyecto – eso fue un balde para la bruja, eso significaba que debían finiquitar todo antes del miércoles de la semana próxima ¡Joder! – Su madre ha mandado una carta, le dice que el sábado debe ir a cenar a casa, es el cumpleaños de su padre – la castaña asintió sonriendo, su madre siempre creía que lo olvidaría por estar siempre tan ocupada – además el señor Potter le ha mandado también una carta, aquí le dejo todo los documentos señorita. ¿Pedirá almuerzo o saldrá hoy?

- Hoy tengo un almuerzo en la oficina.

- Bien – dijo sonriente. – Sigue estando indispuesta para la señorita Weasley – y aunque no era una pregunta, porque parecía que esa mujer era un poco telepata, la castaña asintió con desgana. Definitivamente aún estaba indispuesta para ver a su mejor amiga.

- En un rato te mando las respuestas de todo, ¿vale? – Claire asintió con vehemencia y dejó todo ordenado en el escritorio de su jefa, saliendo del despacho con mucha elegancia.

Temía tocar algo que el rubio había tocado, temía estar junto a él, observar sus anotaciones, cada letra escrita con su pulcra caligrafía. Le temía, lo hacía porque no podía dejar de sentir ese vertiginoso huracán que le daba giros centrípetos de 180° a cada rato.

Con manos temblorosas tomó el primer sobre y sacó el contenido. Se acomodo en su asiento y comenzó a hojear cada palabra escrita. Definitivamente la caligrafía del rubio era excepcional.

Señorita Granger.

Anexo todas las observaciones pertinentes, las cuales conciernen al proyecto: Por un mundo sin prejuicios sociales, culturales, raciales y sanguíneos. Evidentemente este no es el título del proyecto oficialmente, pero quiero que tenga en consideración estás cualidades que debemos indagar para de este modo poder evitar un resurgimiento mortifago, la creación de un nuevo Lord Tenebroso y más aún, evitar a toda costa que jóvenes inocentes tengan estipulado en su cerebro que la "pureza de la sangre" significa realmente algo importante.