Introducción

659 296 111
                                    

Cuenta una leyenda japonesa que un hilo rojo invisible conecta aquellos que están destinados a conocerse. Sin importar el tiempo, lugar o circunstancias; el hilo se puede estirar, contraer, enredar, pero nunca romper.


Bonito, ¿no?

Eso explicaría la razón por la cual él se cruzó en mi camino, como una potente y adictiva droga invadiendo todo mi torrente sanguíneo, alterando mis sentidos y desordenando mi existencia.

Cada milímetro de mi cuerpo le pertenecía.

Todo tatuaje de su piel era mi perdición.

Desordenas mi vida [✓]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora