-Mari ¿Cómo estuvo tú día?
-Bien, supongo.
Se encogió de hombros restándole importancia al asunto, quería decirle de él gran acontecimiento que había sucedido pero había acordado con Luka el darle la noticia en una cena o algo especial. Una sonrisa que quería plasmarse en su rostro fue interrumpida ya que esta se mordió su mejilla regresando a su cara de poker.
-¿Y el tuyo? - traía dos tazas con café sentándose en el sofá dándole una a Alya- ¿Qué hiciste hoy?
Alya quería preguntar lo que había visto pero si Marinette no había sacado el tema ¿Por qué lo haría ella? Sería vista como una metiche por espiarla e incluso creería que la estuvo siguiendo. Había hablado con Adrien de Marc y tal vez tendría que hacerlo con otra persona con tal de aliviar un poco la presión en su pecho.
-Mal, sinceramente fue una mierda.
Dejó su taza tomando las manos de su hermana viéndola con suma preocupación, sus ojos se cristalizaban preocupando más a la azabache.
-¿Qué pasó? ¿Enfermaste? ¿Discutiste? Dime Al, ¿Qué te tiene así?
-Es Marc - Marinette abrió los ojos por completo ante la sorpresa del nombre ya que desde que llegaron a París no se había hablado de aquel cretino - El....
-¿El? - acarició su mejilla limpiando una lágrima que rodaba - ¿Qué hizo el idiota?
-No te lo dije porque se supone que eramos amigos pero - su voz se quebró comenzando a llorar siendo recibida por los brazos de Marinette - El me engaño Mari, no sólo una, si no me enteré que fue desde que iniciamos la relación.
Simplemente la tenía pegada a su cuerpo peinando su cabello escuchando con atención lo que le había echo ese maldito pelinegro a su hermana, tenía unas inmensas ganas de salir y tomar un vuelo con tal de reclamarle. Era un idiota, ella lo sabía pero no pensaba hasta que grado.
Únicamente los sollozos de la morena y su relato era lo que invadía el lugar, todo el dolor que tenía retenido parecía esfumarse en esa tarde, en verdad que tener a Marinette y Adrien era un gran soporte para ella. E inclusive Nino la había apoyado con una simple oración "Esta bien odiarlo" sus ojos marrones vinieron a su mente sacudiendo internamente la cabeza al pensar en el pervertido de su vecino.
-Idiota.
-¿Eh? - Marinette se separó encontrando una sonrisa y las pocas lágrimas que parecían quedar en sus ojos - ¿Marc? Lo es.
Ambas rieron quedándose abrazadas en el sofá compartiendo aquel momento como cuando eran niñas una apoyándose de la otra y viceversa.
-Gracias hermanita.
-De nada Ali, siempre estaré contigo.
Sabía que era idiota la cosa que quería preguntar tomando en cuenta lo que había visto, pero tampoco podía hacer de la vista gorda al ver la mirada de su amigo al verla.
-Mari - se separó de ella ganando toda su atención - ¿Puedo preguntar algo?
-¿Es broma? Siempre haces cualquier tipo de preguntas incluso aveces logran ser incomodas, adelante.
-Tu - dudo por un segundo al saber que pisaria una tierra la cual apenas se estaba aplanando - ¿Sientes algo por Adrien?
-¿Adrien?
Su nombre era más una pregunta para si misma que no podía responder, el rubio había despertado su curiosidad desde el segundo encuentro que habían tenido, idiota, si. El cómo corrió detrás de ella sin tener ningún tipo de relación entre ellos con la excusa de "Preocupaciones" el era raro, un enigma que ella quería entender, tan impredecible que escasamente sabría lo que diría.

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El amor de mi vida (MLB)
RandomAdrien y Nino : Amigos desde los 7 hasta sus actuales 21 mujeriegos sin remedio, sin ningún compromiso de por medio, y tomándose todo a la ligera, estando con las chicas solo para sus propios fines. Alya y Marinette : Amigas desde los 3 hasta sus 20...