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Después de aquel pequeño "Reencuentro" comenzaron hablándole a Adrien y Marinette para comenzar a planear el escenario y demás, dejando evidentemente como en cambio Alya y Nino no dejaban de discutir.

-¿Acaso ni con esos lentes puedes ver bien? - dijo la morena con el entrecejo fruncido- Eres un completo idiota.

-¿Te recuerdo que tu igual usas lentes? - dijo el Moreno ya que ellos ya estaban listos solo faltaba que terminarán su amigo y la azabache- Al menos no soy un histérico como tú.

-Oh, púes perdón por molestarme por no dejarme trabajar, fue mi error, discúlpeme noble caballero - optando una pose como si se estuviera disculpando - Tal vez sea histérica, al menos no le hablo bonito a cualquier cosa que se mueva.

-¡Ey, no me conoces! - dijo el Moreno poniéndose de pie para así enfrentar a la morena- ¡Ella no es cualquiera!

-Al igual que tú no me conoces a mi, pero mira, aún así me dijiste histérica, lunatica y no se que más  pedazo de...

-Alya calma, estoy contigo - la azabache ya estaba a su lado haciéndole ojos de cachorro para que pudiera tranquilizarse - Recuerda que eres la más paciente y genial, así que no te enojes Alya.

La morena relajo sus facciones,en cambio una sonrisa tomó el lugar de lo que antes había sido una de las peores caras de ella, recordando la vez que había conocido a marinette y desde que eran niñas siempre usaba ese truco para que se calmara o la hiciera sentir bien.

-Nunca cambias, anda, vamos por una botella de agua, aún no llega tu amigo así que.. - le guiño un ojo a lo que de inmediato entendió- No puedes...

-Le tapó la boca con una de sus manos haciendo que esta se callase, ya que sus palabras provocaron que el rubor se apoderara de su rostro - De-deja de decir idioteces, tu sabes quien es el único chico que me ha interesado, pero anda, vamos.

Y así ambas se fueron a la mesa donde habían algunos refrigerios, haciendo que Nino se quedara solo nuevamente.

-Si que están locas -rascandose la nuca - Pobre el chico que se fije en una de ellas.

-Parece que se llevan ¿Bien? - apareció su amigo con las manos en los bolsillo en una actitud despreocupada- Parecen divertirse.

-Ni de coña, no digas estupideces Adrien, ser oxigenado no te deja pensar y ver las cosas con claridad - soltando una fuerte bocanada de aire- Es demasiado ¿Diferente? Solo puedo decirte que no es mi tipo en lo absoluto.

-Te hace salir de tus casilla - se sentó al lado de su amigo con una gran sonrisa - Amigo, en los años que te conozco, solo a habido una persona que te hacía comportarte de esta manera, y dejame decirte que terminaste completamente en....

-Callate Adrien, no quiero recordarla, es bastante estresante pensar en eso, lo peor es que aún la quiero, después de todo aún la quiero a mi lado.

Los amigos se quedaron en silencio, para ser sinceros el que tenía un carácter y una personalidad más difícil de tratar era Adrien, Nino siempre era el relajado, el que evitaba que se metiesen en problemas, pero} ver a su amigo en esa actitud estresada que casi nunca dejaba ver, en cierta forma lo divertía y preocupaba.

-Relajate, ya va a comenzar la sesión, la falla de hace un rato se arregló, no tardará en que nos llamen a los cuatro nuevamente, tal vez cómo hablaron con nosotros ahora hagan lo mismo con ustedes.

-¿Ya encontraron al responsable? - dijo por fin con la actitud de siempre - ¿Quién fue?

-Fue mi hermana, dijo que era una venganza hacia mí padre por no haber ido a comer helado con ella.

El amor de mi vida (MLB) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora