Otoños olvidados
en su máxima expresión,
libros que fueron tirados
en la esquina de un rincón.
Hojas marchitas que aterrizan
sobre el suelo con pasión,
ojalá ver como besos tizan
de tus labios bermellón.
Roble oscuro y madera
congelan la habitación
donde de tus ojos pareciera
escribir en cada ocasión.
Es que son tantos los recuerdos,
mucha la imaginación,
que con locura a los más cuerdos
despojaban la razón.
Mientras deliro en vanos
pensamientos en fracción,
tomaré firme tus manos
y latirá mi corazón.
Como flores en invierno,
crecerás sin distracción
entre notas de mi cuaderno
y torpeza de redacción.
Eternidad de las promesas,
anillos de algodón,
me gustan esas fresas
—exclusivas como ibón—
comisura de tu boca
que deriva cual canción.
Me viviré en tus pupilas
siempre, sin modificación.

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𝑬𝒍 𝑨𝒓𝒄𝒉𝒊𝒗𝒐 𝒅𝒆 𝑳𝒂𝒔 𝑭𝒖𝒓𝒊𝒂𝒔 ✓
PoesíaDe una entrega de poesía a una saga lírica recopilada, El Archivo de Las Furias introduce a la escena los sentimientos y temáticas dentro de la mente del autor, añadiendo además algunos escritos en relación a los contenidos de la historia. Las Furi...