Capítulo 32 (maratón 2/3)

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—Y mamá, como te estaba diciendo, gulf va a tener mi apellido, incluso lo quieres ya, así que no pasaré por las novelas mexicanas donde la suegra odia la pareja de sus hijos.

Mamá levantó una ceja y dejó su taza que dice "Te iba a dar un viaje a Hawaii, pero fué muy caro" en la mesa.

—Cariño, ¿Que te he dicho de los amarres? No están bien—negó con la cabeza y se apretó el puente de la nariz.

Probablemente se está preguntando porqué no usó protección o algo así.

—¡Pero ma'! No voy a hacer ningún ritual satánico, lo haré a la antigüita, mira, ya tengo un plan, primero le voy a llevar serenata, luego voy a darle un yibo de cartón tamaño real a la mamá de gulf, así me la gano, y por último le entregaré mi anillo de castidad —le conté  mi plan con orgullo inflando el pecho como paloma.

Ese hombre ya es padre de chopper, nomás aún no lo sabe.

Bright decidió meter su nariz interrumpiendo mi momento de gloria.

—Mew, tu "plan"—hizo comillas—tiene algunas fallas, a tú guitarra le faltan 2 cuerdas, no sabes a quien prefiere la mamá de gulf, si a yibo o zhan, y por último ¡Ni siquiera tienes anillo de castidad! Y si tuvieras, habría quedado obsoleto hace mucho, eso y también lo habrías empeñado hace rato—Exclamó el que se pone bizco cuando se enoja.

—¡Así te haces llamar mi hermano! Lo siento bright, pero solo eres mi brother—puse dramáticamente una mano en mi pecho simulando el puñal que sentí.

Bright rodó los ojos acostumbrados a mi dramatismo

—Brother es "hermano" en inglés cariño—mamá volvió a negar con la cabeza— sé que tú pureza se esfumó al igual que tu dignidad en ese viaje escolar, pero si te gusta gulf, te apoyo cielo, si necesitas mi ayuda solo dime, ese muchacho me gusta—sonrío—a todo esto ¿que canción le dedicarías?

— A gulf alguna en chino aunque no sepa un carajo, pero seguro le gusta y a los papás la de "su hija me gusta" solo espero no crean que me gusta su hija, hija—finalicé mi espectacular plan sin ninguna falla en el.

Mamá me miró fijamente con la incredulidad plasmada en sus rasgos y Bright estalló en risas.

—Cuando te echen un balde de agua fría, quiero estar ahí—habló ahogándose entre risas bright.

—¡Ya verás cuando ese hermoso moreno tenga mi apellido junto al suyo!

Bright se seguía ahogando pero un grito detuvo su risa.

—¡MEW SUPPASIT TÚ Y TU PUTO BARRIO DE DELINCUENTES!

Era la voz del dueño de mis sueños y futuros sueldos.

Salí corriendo en busca de su llamado

—¡¿Que pasó mi corazoncito de melocotón?!—Gulf me miró furioso y caminó hacia mi pisando fuerte.

Bueno, tuve una buena vida, conocí el amor, fuí a un concierto de paquita la la barrio y disfruté en vivo la belleza de rata de dos patas y en mi testamento ya aclaré que todas mis deudas quedan a nombre de bright.

—¡TU! ¡TÚ Y TU MALDITO BARRIO DE DELINCUENTES, TE DIJE QUE NO ME IBA A BAJAR PERO TÚ Y TUS ESTUPIDOS OJOS DE CACHORRO Y LA VEJIGA DE WIN ME OBLIGARON! ¡Y AHORA EL MALDITO AUTO DE MAMÁ NO TIENE LLANTAS!—Me comenzó a sacudir de la camiseta una y otra vez mientras hablaba.

Ay, se lo ve hermoso enojado, sip, dejo en sus manos que arregle la raza.

—¡¿Me estás escuchando siquiera?!—gritó cruzando los brazos dejando mi pobre camiseta maltrecha.

—¡Claro! Dijiste que tengo hermosos ojos y que la vejiga de win es del tamaño de una nuez.

Ante su nombre el mencionado levantó la cabeza.

—¡Oye! ¡oí eso!

—¡Oh Por dios gulf, tu auto no tiene llantas!—apareció bright junto con mamá.

Gulf inhaló y exhaló 3 veces.

—Gracias capitán obvio—leyó mis pensamientos el niño conejo.

—¡Valgame! ¡no te quedes ahí parado mew! ¡Haz algo!—regañó mamá viendo consternada el auto sin llantas estacionado.

—¿Que quieres que haga? ¡No soy una llanta! ¡Ni soy mecánico!

—¡Pero tienes a alguien que si!—gritó gulf con las manos en la cabeza.

—¿Quien?—Pregunté confundido.

No tengo idea de quien, oooh.

—¡El tío Luis!—Gritamos emocionados bright y yo.

Bright entró a la casa y me lanzó el móvil que había dejado cargando en el comedor.

El móvil cayó al piso con la pantalla abajo.

Todos quedamos viendo el dispositivo en el piso, juro que si la pantalla se rompió voy a sacarle un órgano con una cuchara y lo venderé para reparar mi celular.

—¡¿Que carajos sucede contigo?!

—¡Perdón! ¡Me senti en una película por un segundo! ¡se supone que tenias que atraparlo!

—¡Atraparlo mis nalgas!—tomé el móvil del piso y por suerte no se había roto la pantalla, con velocidad marqué el número de antes.

No contestó.

—No contesta—comuniqué.

—¡Sigue intentando!—insistió mamá.

Seguí intentando y en la tercera llamada contestó.

—¿Quie...oh, Leo detente—se escuchó jadeos en la línea—¿Qui-Quien es?

—¿Tío? Soy mew, necesitamos ayuda

—Me-Ugh Mew–—seguían los jadeos en la línea, si es lo que creo que es, ahora también tendré que blanquearme los oídos.—estoy algo ocupado ¿Q-Que sucede?

—A gulf le robaron las 4 llantas, necesitamos repuestos—le expliqué, se siguieron escuchando jadeos y pocos gemidos.

—Ahora no p-puedo me-mew, me caí de nuevo, iré mañana por la tarde—y colgó

—¿Y? ¿Que dijo? ¿Vendrá?—preguntó esperanzado gulf.

—Eh, no, dijo que mañana, estaba ocupado—respondí sintiendo el rostro rojo.

No sé cómo veré al tío Luis después de esto.

—¡AAAAAH! ¡No es posible que mi suerte ande tan horrible! ¡seguro me están haciendo brujería!—habló caminando en círculos gulf, de repente paró—¿Hay alguna persona que haga limpias y esas cosas hippies aquí?

—¿Eh? Si, pero hoy no están atendiendo—respondí confundido.

—¡Genial! Mañana iremos tú y yo a que me limpien, luego seguiré con mi vida normalmente.

¿Cómo una cita?

—¡No es una cita!—Exclamó rojo hasta el pecho, creo que leyó mis pensamientos.

Sonreí

Si, es una cita.

¿Tienes Queso de Cabra? [Mewgulf]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora