Oneshots eroticos Armando & Betty

Tengo el control.

Betty estaba apoyada en el marco de la puerta esperando a su esposo, se encontraba vestida con una diminuta ropa interior de encaje de color rojo. Armando llegaría del trabajo en unos minutos y quería sorprenderlo con una sensual sorpresa, esta vez ella quería tomar el control y darle un sexo maravilloso.

Le había costado prepararse para esta ocasión ya que Betty era una persona muy tímida, pero ya tenia la suficiente confianza con Armando como para dudar de su belleza y su cuerpo, él se había encargado de demostrarle en reiteradas ocasiones que lo volvía loco en la cama.

Estaban a punto de cumplir tres años juntos y tenía todo preparado para esta noche, su hija Camila estaba en casa de sus padres, así que podrían celebrar en grande y sin preocuparse de que alguien los escuchara.

Se pinto los labios color rojo sintiéndose atrevida pero ardiente a la vez, se miraba al espejo una y otra vez, su cuerpo y su rostro se veían completamente diferente, era como una Betty más osada y sensual, le gustaba lo que veía.

Una vez se escuchó el crujido de la puerta abriéndose Betty sintió una oleada de adrenalina recorriendo su espalda, sus mejillas se tiñeron de rojo, pero se sentía lo suficientemente segura y sensual como para dar marcha atrás.

—¿Mi amorr? —gritó Armando llamándola, pero sin tener respuesta. —

Él se desajusto la corbata y se dejó caer agotado en el sofá, esta vez se había quedado trabajando más de lo esperado y no entendía porque su esposa quería llegar lo antes posible a su casa, quizás había tenido algún problema, de hecho, se estaba empezando a preocupar.

—¿Betty?... —tampoco obtuvo respuesta —

Esta vez se paró resignado caminando por el pasillo, pero sus pasos fueron interrumpidos por unos brazos femeninos que lo abrazaban por detrás. Armando se quedó estático y trato de abrazarla también, pero ella se lo impidió y lo empujo con fuerza hacia la pared. Su espalda choco contra esta y sintió como las manos de su mujer lo acariciaban de arriba hacia abajo tratando de quitarle la camisa, podía sentir su respiración agitada detrás de él y su cuerpo meciéndose sobre su torso, había poca luz pero podía notar que Betty estaba en ropa interior.

—Mi amor... ¿que haces?...Betty... —jadeo extrañado— estas en ropa interior...

Nunca había visto a Betty así, tan osada, eso era algo nuevo y muy excitante, trato de acariciarla pero ella tomo sus manos deteniéndolo y negó con su cabeza.

—Shh... —lo silencio— no te he dicho que hables...

—Amorr... —rio nervioso— ¿qué pasa, que haces?

Betty lo miro con la mirada oscurecida y sus manos fueron directamente a su cremallera, Armando jadeo sorprendido apoyando su cuerpo sobre la pared mientras la miraba expectante. Las manos de Betty tocaron con descaro su miembro encima de su pantalón de traje de arriba hacia abajo.

—Uy amor, espera... déjame acostar a Camilita... —Sus palabras fueron interrumpidas por el dedo de Betty sobre sus labios. —

—Camila esta con mi mamá amor, estamos solos.

—Ah...bueno mi vida, entonces mi picarona, vamos a la cama... esta noche madrugáremos —sus manos trataron de tomarla por la cintura pero Betty alejo sus manos mirándolo seriamente.—

—Armando...esta noche tendrás qué obedecerme, yo tengo el control. —soltó levantando una ceja—

Se escuchaba seria y segura de sí misma, Armando se quedó inmóvil contemplándola, estaba gratamente sorprendido, no sabía lo que le esperaba.