Eleven (Serendipia III)

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—Que bien, por fin estás aquí— Dice Kate abrazándome.

—No me quedaba de otra— Digo fingiendo emoción.

—¿Qué tal todo por Seattle?— Dice Maddie.

—No me puedo quejar— Me encojo de hombros.

—Claro que no puedes— Dice Ashley quitándome el bolso de Chanel.

—Bueno, ¿y vosotras?— Digo mirando a Ashley y Maddie. Ambas siguen viviendo en Atlanta, hacía mucho tiempo que no habla con ellas.

—Empecé diseño pero mis padres no pudieron pagarme la universidad y lo tuve que dejar— Dice Ashley.

—Pero tú tenías muy buenas notas, ¿no te dieron una beca?— Es una pena que Ashley no pudiese estudiar, es una chica muy inteligente.

—La universidad era demasiado cara, hasta con una beca—

—Siento oír eso—

Caminamos hacia vecindario en el que viven Nate y Kate.

Su casa es un adosado precioso de cuatro pisos, se nota que les va bien.

—¿Y tú Maddie?—

Maddie solo sonríe y me enseña su mano derecha. Frunzo el ceño al ver un anillo de diamantes en su dedo anular.

—Se ha prometido con un empresario— Dice Kate.

—Que zorra...— Digo agarrando su mano para ver mejor el anillo de diamantes de su dedo.

—Se llama James—

—James... ¿De dónde es?—

—Luisiana, nos conocimos en un bar en el que yo trabajaba, él estaba en Atlanta por negocios—

—Que fuerte— Digo si quitar la mirada de encima del anillo.

Cuando entramos en la casa de Kate deja mis maletas en el cuarto de invitados.

—¿Está Nate?—

—Está trabajando, volverá en dos horas— Dice mirando el reloj de su muñeca.

—¿Y que hacemos?, ¿nos enseñas San Francisco?— Digo sugerente.

—Estaba esperando a que me lo dijeses—

...

Nos sentamos en un bar que está al lado de la playa y suspiro agobiada.

—Que calor hace en esta ciudad— Digo quitándome la chaqueta.

—¿Te gusta?— Dice Kate.

—La odio, hice bien en no solicitar para la CalU— Digo mirado a mi al rededor.

—Antes te gustaba la playa, ¿que te ha pasado?— Dice Ashley.

—Con el tiempo supongo que he madurado—

—¿Has madurado?, ¿por eso te estás tirado a un chaval de dieciocho años?— Dice Maddie.

—¿Se lo has contado?— Digo mirando a Kate.

—Lo siento, no he podido resistirme—

—No veas como está el niñato— Dice Kate enseñándoles el instagram de Isaac.

—Joder— Dice Maddie. —¿No tiene un hermano o un amigo por ahí?—

—Te vas a casar, asquerosa— Dice Kate quitándole el móvil.

—Lo de Isaac es... algo raro— Me encojo de hombros y juego con la pajita de mi bebida.

—¿Algo raro?—