Después de tres semanas el juez nos comunica la fecha de la primera vista del juicio, es en dos semanas.
—Tienes que presentar una declaración de patrimonio neto— Digo colocándome bien las gafas.
—No hay problema—
—Prepárate mentalmente, un divorcio contencioso puede ser muy duro—
—No te preocupes por mi—
Suena mi móvil y en la pantalla veo el nombre de Isaac.
—¿Que quiere el niñato ahora?—
—Oye, no le llames así— Digo antes de contestar.
—¿Hola?—
—Hola, ¿cómo estás?— Suena nervioso.
—Bien, ¿y tú?, ¿todo bien?—
—Sí, yo te he visto en el TMZ y...—
—No preocupes, no es nada de lo que piensas—
—¿Ah, no?— Dice Ryan.
Le hago un gesto para que se calle.
—¿Estás con él ahora mismo?—
—Sí— Digo nerviosa. —Soy su abogada, por eso he venido— Digo saliendo al balcón de la habitación.
—Logan, si habéis vuelto dímelo—
—Isaac es complicado, no podrías entenderlo—
—Claro, yo nunca entiendo nada porque soy un crío, ¿no?—
—No, yo...—
—Llevo hecho una mierda desde que te fuiste, cada vez que te veo en el TMZ me dan ganas de coger un vuelo a San Francisco y...— Dice con la voz ronca.
—¿Que has bebido?—
—Media botella de vodka—
—Cariño, vete a dormir—
—Deja de hablar como mi madre, por favor— Dice frustrado.
—Isaac, me preocupo por ti, y no quiero que te hagas daño por culpa de esta historia absurda que has creado en tu cabeza—
—¿Absurda?—
—Follamos de vez en cuando, y está muy bien, pero seamos realistas, tú todavía estás en tu primer año de la universidad y yo... yo ya tengo edad para ser madre—
—¿Conmigo no podrías serlo?—
No puedo evitar reírme ante esa pregunta.
Me siento en una de las sillas que hay en el balcón.
—Cuando termines la universidad, tendrás veintidós años, y yo treinta y tres—
—Cuando tú tengas la edad que yo tengo ahora yo tendré cuarenta y...— Hago una mueca solo de pensarlo.
—No veo tanta diferencia—
Ryan sale al balcón y me mira con los brazos cruzados.
—Isaac, ya hablaremos en otro momento— Digo mirando a Ryan.
—Déjalo, creo que no deberíamos hablar por un tiempo— Dice antes de colgar.
Suspiro cansada y miro a Ryan de nuevo esperando a que hable.
—¿Por qué le has dicho que no es lo que piensa?—
—Porque es muy joven, no le quiero hacer daño—
—Házselo, que aprenda que la vida es dura— Dice divertido.
—Qué malo eres— Suelto una risa suave.
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Eleven (Serendipia III)
FanfictionEchar de menos a alguien se vuelve más difícil cada día, porque aunque estés un día más lejos de la última vez que lo viste, estás un día más cerca de la próxima vez que lo verás. Σ