XLVI

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Poco después de que las cosas entre los muchachos se aclararán y que toda la familia estuviera enterada de que hacía Logan en la casa llegó la madre del chico, quien armó un escándalo digno de cualquier obra de teatro.

Pero Sam, que ya estaba cansada de toda la mierda que los rodeada ni siquiera se lo pensó antes de transformarse y dejar que su loba se interpusiera entre la mujer que buscaba a su hijo y su niño.

- Yo que tú ni lo intentaba – le aconsejó Dereck el cual permanecía con los brazos cruzados sobre su pecho y miraba con aburrimiento e indiferencia a la madre de Logan.

- ¿Y quién eres tú para decirme que hacer? – le preguntó ella con voz venenosa.

- Tienes razón, no soy nada – le reconoce – pero si yo estuviera en tú lugar, no intentaría ir contra ella – le respondió divertido.

La madre de Logan lo fulminó con la mirada, para justo después voltearse a ver a Sam.

- Desde el primer día supe que ese niño nos traería la desgracia – escupió con veneno.

La respuesta de todos fue colectiva.

- Será mejor que te retires – habló por primera vez Teresa – no me gusta que gente indeseada esté en mi terrero – le habló con voz contenida y los ojos negros, dejando ver por primera vez a su lobo interno.

- Tranquila querida, me iré en el momento que tenga a mí hijo conmigo – le aseguró Teresa con sorna.

- Eso será si él quiere irse – intervino Mateo – y por lo que tengo entendido él quiere estar con su mates así que ...

- Logan es solo un niño, es claro que no sabe que es lo que quiere – asegura.

- A mí me parece bien claro lo que el muchacho quiere Fiama, deja de hacer el ridículo y acepta de una vez que Logan no va hacer siempre lo que quieres. El chico ha encontrado a su mate y sabes muy bien que no puedes luchar contra eso.

- ¡Soy su madre, puedo luchar contra eso y contra cualquier cosa! – le asegura obcecada.

Los cuatro adultos miran con pena a Fiama, apenados por la forma tan retorcida de pensar de la mujer.

Fiama voltea su cabeza y vuelve a mirar a la loba de Sam, la cual no había relajado su postura y seguía custodiando la puerta.

- Ojalá nunca hubierais vuelto – le escupe en la cara justo después dar media vuelta e irse.

Ninguno de los presentes se molestó en responderle, vieron como la mujer se fue, dejando tras de ella un sabor agridulce.

Porque si, todos estuvieron felices por la unión de los dos, pero al mismo tiempo estuvieron preocupados, porque sí, ante la ley Logan no era todavía un adulto, además de que temían cual podría llegar a ser la reacción del joven al ver el rechazo que le procesaba su madre a su compañero.

Poco tiempo después de ese incidente el alfa Samuel fue el que se presentó en la casa, y si, el motivo de su visita fue por la queja que presentó Fiama, la cual había alegado que Sam y Dereck se habían llevado a su hijo y lo habían convencido de hacer cosas que él no quería. Y aunque Samuel sabía que las acusaciones de la mujer eran mentira no podía ir en su contra, debía actuar como el alfa que era e ir a pedir explicaciones a la pareja, la cual, claramente no se mostraron muy felices de verlo en su puerta.

- ¿Puedo pasar? – preguntó por mera cortesía.

- ¡No! – respondió tajante Dereck, el cual se interpuso en el camino del alfa.

UN GATO ENTRE LOBOSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora