Legacy - Mikasa & Tu

Riesgos

Cuando ____ se levantó esa mañana, luego de vendarse y cambiarse, procuró encontrar al joven que vendía flores por la calle. El sitio estaba bastante tranquilo y se respiraba un hermoso aire fresco. Pronto comenzaría la construcción de vías de ferrocarril y eso daba aires de esperanza y futuro para los habitantes de Eldia de Paradis.

—Buenos días ¿Tienes una rosa roja?

—Claro, tenga— sonrió con amabilidad para luego recibir el pago — Que tenga un buen día.

—Igualmente.

Llegando rápidamente a la entrada de la habitación de Mikasa, justo en el horario en el que ella solía salir. Se arregló la camisa y esperó unos minutos hasta ver a la joven abrir la puerta con su uniforme de la legión.

—Ey.

—Ey— repitió con una expresión algo indiferente.

—Feliz cumpleaños— susurró apenada y algo tímida para ser la capitana, le extendió la rosa el cual simplemente la toma.

—Gracias— respondió con una pequeña sonrisa forzada pretendiendo seguir caminando, pasando por su costado, pero ____ queda a su paso.

—¿Quieres hacer algo? Salir por ahí...

—Tengo que ir al campo de tiro y hacer varias tareas, lo siento— negó haciendo una mueca con su boca —Nos vemos luego, capitana.

____ simplemente lo dejó pasar, sabía que la chica no estaría de ánimos y era evidente. Se había comportado como una idiota, y ahora debía esperar a que la morocha quisiera darle una oportunidad para hablar.

Al llegar a la zona de la costa donde se encontraba cocinando aquel Niccolo, nuevamente para los soldados anti marleyanos, Sasha también se encontraba allí degustando algunos platos. La felicidad de la joven era evidente al disfrutar esa nueva comida que los nuevos aliados habían traído a sus tierras.

—Ey, ¿Qué comes?

—Langostinos, esta bueno ¿Pruebas?

___ sonríe —No, estoy bien— miró al rubio quien le dedicaba un saludo sin muchas ganas, aun parecía ser que había rencor con su secuestro en aquel bote—. ¿Tienes café?

—Solo vienes aquí por café, esto no es un comedor...

—Pero tienes...— insinuó, dejando que vire los ojos y se acerque a una jarra de metal para luego verterlo en una taza y acercándoselo—. Gracias.

—¿Cómo te has hecho eso? — preguntó refiriéndose a sus brazos y ___ levanta sus hombros.

—Salvando a un compañero, somos muy leales entre nosotros— le sonríe mientras mira por debajo de sus vendas como en algunos sectores de su piel se veían horribles —. Sigue así y sentirás lo que es dar todo por nuestros soldados.

—Ya veo— responde algo sarcástico.

—¿Has arreglado las cosas con Mikasa? — preguntó Sasha de repente, lo que hace que ____ la mire sorprendida.

—¿Y tú como estas enterada de que algo pasó? — volvió a preguntar con la ceja levantada.

—Ha estado de mal humor, más de lo costumbre— responde para seguir comiendo —. Y soltó tu nombre entre insultos cuando entrenaba, y a Yelena creo...

____ tragó con dificultad —Mierda.

—¿Hasta cuándo estarás dándole vueltas? — habló tragando —. Es algo no oficial pero que todos ya lo saben, o al menos la legión.

—¿Hablas de Ackerman? hasta yo me he dado cuenta— aportó Niccolo y Sasha lo señaló para entender su punto.

—Deja de jugar con ella, y de ser una idiota— la apunta con la langosta y _____ frunció el ceño.