•No es fácil decirte adiós•

⁷⁹· ᴄᴇᴡ - sᴄʙ

Desde que eran tan sólo unos niños, las cosas fueron de mal en peor, bueno, ciertamente, eso fue, desde que ni siquiera habían nacido, pues, los business, en los cuales estaban metidos sus padres, tarde o temprano, traería consecuencias y cobraría factura. Cuando apenas y tenían un año, ambos quedaron huérfanos, prácticamente al mismo tiempo.

Cha EunWoo, el mayor de ellos, siempre fue un niño muy tímido y reservado, era rara la vez que conversaba con alguien, la mayor parte del tiempo, se la pasaba ya fuera en su habitación, en el patio de la casa, o simplemente en la sala haciendo cualquier cosa que le ayudara a lidiar con el aburrimiento, y, otras cosas aparte.

A pesar de que era reservado, y todo lo que sufrió en el pasado, él seguía siendo una buena persona con todos, y trataba de ayudar en todo lo que le fuera posible, estaba más que claro, que era todo lo contrario a "su hermano". Sus padres adoptivos, creían que si el niño era así de asocial, quizá era por algo que ocurrió en el pasado, o simple y llanamente, porque así era su personalidad.

Seo ChangBin, él era todo lo opuesto a EunWoo, pues, a su gran y notable diferencia, él siempre fue muy extrovertido, para nada reservado, conversaba con todos, y siempre tenía una gran sonrisa dibujada en el rostro, pareciera que todo en su vida iba bien, y que lo que le puso haber afectado en el pasado, lo iba superando poco a poco, pero la realidad era una completamente distinta a la que los demás imaginaban, o bueno, más bien, a la que podrían imaginar.

Realmente le afectaba demasiado la muerte de sus padres, y era algo, que jamás podría superar ni mucho menos sobrellevar, de una manera tan sencilla, como quisiera, pero, al menos "lo intentaría", bueno, eso era lo que siempre decía a su madre adoptiva.

Él, mejor prefería hacer como si nada, antes que destruirse a sí mismo, en cualquier situación y frente a quien fuera. Ciertamente, Changbin podía ser de todo, menos, bien portado, porque, tanto sus padres adoptivos, como el resto de la familia, desde que el niño fue creciendo de poco a poco, se dieron cuenta inevitablemente, de que él sería el hiperactivo de la familia, el causante de todos los desastres, etcétera.

Si, él y su hermano, eran muy distintos en todos los aspectos posibles, polos opuestos, uno era bondad pura, y el otro, maldad pura , pero aún así, a pesar de eso, quienes los acogieron, "siempre seguirían queriendo por igual a ambos" pero, claramente era todo lo contrario, o bueno, al menos desde la perspectiva del más pequeño, así era.

Pues, siempre creyó ciegamente, en que, a Eunwoo lo querían más.

A causa de ello, a partir de ahí y en el futuro, podrían pasar todo tipo de cosas, pero "no había de qué preocuparse" "pues graves no serían".

Al menos eso querían creer los señores Jeon. Porque a pesar de las "advertencias en el pasado" ellos aún así, querrían mucho a ambos.

Nadie sabía realmente que era lo que pasaba por las mentes de ambos, sobre todo, por la de Changbin, pero, nuevamente, no habría motivos para alarmarse por nada.

Vaya, ni siquiera por las maldades que llegó a hacer el más chico en su niñez, "son niños" "así juegan ellos" "son cosas que todos hacen a esa edad" entre otros tantos argumentos tontos, que al igual que la mayoría de gente, ellos decían, creían y sostenían, y claro, por supuesto, generalizando.

Tanto los padres de EunWoo como los de ChangBin, murieron de una manera similar, prácticamente, esto, debido al "negocio" en el cual estaban involucrados.

Los señores Jeon, eran amigos cercanos a ellos, ¿Que si sabían en lo que estaban metidos? Claro que sí, desde el primer instante, pero claro, como era de esperarse, ellos no podrían hacer nada al respecto ni aunque quisieran, añadiendo que, los otros cuatro, siempre pero siempre, les decían, más bien pedían... Bueno, les ordenaban prácticamente, que no se metieran. Sí, también sus madres estaban metidas en el embrollo, sino ¿Cómo fue posible, que conocieran a sus parejas? Exacto, de una manera, para nada linda, al menos, para cualquier otra persona.

El día que fallecieron, sus amigos de, toda la vida, se enteraron de lo ocurrido, claro, no les sorprendió en lo más mínimo, a pesar de que no les hubieran perdido el favor, ellos se comprometieron a cuidar de los pequeños a partir de ese instante, y bueno, también añadiendo de que en algún punto del pasado de los seis, a manera de broma, o bueno, no del todo, habían pedido de favor, que si en algún futuro ellos llegaban a faltar, pues claro, estaban más que conscientes que eso llegaría a ocurrir, y que ni ahora ni nunca, habría vuelta atrás, metidos ya estaban en eso, y salir de ahí, no sería posible de ninguna forma, en fin, si ellos llegaban a faltar, querían que Jeon Jung - San y Jeon Kyung-Soo se hicieran cargo de cuidar de los pequeños. Lo único difícil para la pareja, ahora sería el como les dirían a los pequeños que ellos no eran sus padres biológicos, y peor aún, cómo les dirían cual era el origen de quienes realmente, si lo eran, sabina bien, que tarde o temprano, algún día, tendrían que saberlo, no podrían ocultarlo para siempre. En definitiva, cosa fácil, no sería, pero, confiaban mucho en que tarde o temprano, encontrarían la manera adecuada para decírselos.

Cómo bien sabemos, todo ser vivo, desde que nace, tiene consigo un sentido común, claramente, EunWoo y Changbin, no serían la excepción.

Los niños de alguna manera, sentían que ellos no eran sus padres, ¿Cómo lo sabían? Ni siquiera ellos tenían una respuesta congruente, simplemente, lo sabían y sentían.

- Appa, Omma ¿Dónde están? - repetían de vez en cuando en voz bajita, de manera inconsciente, ambos niños -

- Algún día lo sabrán, hijos - pensaban Jung-San y Kyung-soo cuando les oían -

Todos alguna vez hemos escuchado por ahí, ese dicho de que la sangre llama, lo cual, era el caso de ambos.

La falta de una figura paterna y materna, realmente les hacía falta alguna y les afectaría de una manera u otra en el futuro, sobre todo, para el menor de ambos, ya que a pesar de tener a los señores Jeon como "sus padres" para ellos no era suficiente.

El tiempo que ellos consideraron ya era el indicado para decirles la verdad, había llegado.

EunWoo tenía dieciséis recién cumplidos y ChangBin estaba próximo a tan sólo unos cuantos meses más para cumplirlos.

Lo hablaron con ellos, y sus reacciones no se hicieron esperar, a pesar de que les tomó por sorpresa, el golpe no fue tan "duro" ya que, volviendo nuevamente a lo que dijimos con anterioridad sobre el sentido común, ellos de alguna manera, "ya se lo esperaban". Aún así, a pesar de eso, ChangBin fue el que tuvo una reacción para nada buena, EunWoo trató de tranquilizarlo, pero no lo logró, a cambio, lo que ganó, fue un empujón, una mala cara e insultos sin sentido.

Cuando las cosas lograron calmarse por completo, la conversación finalizó en un.

- Podrán usar sus apellidos reales cuando sean mayores si así lo desean.

- habló Kyung - Soo antes de salir de la sala, seguido de su esposa -

Ellos sólo asintieron.

•

Lo que ellos menos querían que ocurriera, terminó sucediendo. Los chicos habían entrado al negocio.

Lo peor, es que no sabían ni por qué, o, tal vez sí.
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Bueno, he aquí esta parte, espero y les haya gustado.
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