Pista 7

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Donghyuck despertó de su largo sueño, no le gustaba viajar en avión porque llevaba un año con las mismas pesadillas. Se había dicho una y otra vez que su obsesión con Mark estaba superando los límites, debía dejarlo ir, había más personas... Aunque nadie como él.

Todos sus sueños trataban del canadiense, es como si algo lo impulsara a buscarlo, pero, no era normal, Haechan sentía que estaba girando en torno a una persona que ni siquiera lo buscaba, debía olvidarlo. 

Debía seguir su vida, tratar de hacer más amigos, algo que lo distrajera...

—Tío Hyuckie, mira, mira —un pequeño niño hablador se pegaba al vidrio de la ventana.

—Sungchan, ten cuidado —dijo Taeyong.

Los cuatro viajaban en avión hacia su destino. Uno donde ni YoonOh ni Donghyuck estaban planeados, pero Taeyong insistió en que debían ir todos porque eran una familia. YoonOh fue conmovido y Donghyuck arrastrado con ellos. Y todo porque ellos ya entrenaban juntos en Seúl.

Taeyong había recibido una invitación para hacer una demostración sobre hielo que sería organizada por Ten en Tailandia.

Sungchan tenía dos años y era enorme, iba a ser un patinador muy alto según YoonOh, y ese pequeño bebé tenía el poder de controlar a Donghyuck a su voluntad, el moreno se desvivía por el niño, aunque fingiera ser fuerte, era tan débil y de caramelo cuando del bebé se trataba.

El tailandés los esperaba ansioso. Al fin su país tendría un espectacular espectáculo sobre hielo.

YoonOh estaba muy emocionado y Sungchan estaba igual al ver la combinación de colores de la pista donde estaban. Ten invitó a YoonOh y a Haechan a participar, pero YoonOh se negó porque quería cuidar a su hijo y el moreno no quiso porque quería quedarse con YoonOh cuidando a Sungchan y los vestuarios eran ridículos.

Pero ridículo fue cuando vio que entre los patinadores de la pista estaba Mark.

Ten y Taeyong fueron a ensayar y los Jung y Haechan se sentaron en las gradas a ver cómo transcurriría el evento. No podían negar que el tailandés tenía estilo para realizar eventos asombrosos con calidad internacional entre su reparto.

—¡Mamá! — gritó Sungchan desde las gradas y Taeyong lo saludaba con amor.

Taeyong estaba sobre el hielo y saludaba con emoción a su hijo, Sungchan se veía ilusionado y muy sonriente.

—Estoy celoso de que no me invitaran a patinar aquí, quiero compartir la pista de hielo con el hombre con el que compartiré mi vida sin necesidad de que sea en una competencia. —habló Jung sin dejar de ver la pista.

Donghyuck sentía eso también, Ten nunca lo invitó personalmente, su cabeza decía que era porque el tailandés le tenía envidia por ganarle, porque personas con tantas medallas como ellos no podrían presentarse en un lugar así por gusto.

Pero dolía que Mark si estuviera contemplado y Donghyuck no.

—¡Tennie! —gritó Sungchan mientras saludaba a todos de lejos, su carita estaba llena de emoción más su mala pronunciación emocionaba a todo el elenco.

El ensayo se interrumpió para tomar un descanso, los mayores fueron por el niño para que patinara con ellos y se tomara fotos.

YoonOh trataba de sonreír de lejos. Pero veía un cuadro donde no estaba invitado, él dedicó toda su juventud a entrenar y no a divertirse y hacer amigos, así que era difícil para él integrarse.

— Donghyuck recuerda siempre tratar a las personas de una forma amable, vive sin arrepentirte, ama lo más fuerte que puedas. —Luego hizo una pausa y se le quedó viendo. —Este último año dejaste de sonreír, recientemente ganaste un oro con el tema del desamor... ¿Terminaste con tu novia?

—Oh, no tendré esta conversación contigo —Donghyuck se puso a la defensiva.

—¿Por qué? Somos como familia, debes decirme. —YoonOh le acarició la cabeza.

—No eres mi padre, ah, pobre Sungchan tendrá que soportarte toda la vida—Donghyuck volvió a sonreír mientras fingía estar indignado.

—Solo quiero decir que busques tu felicidad, eres un prodigio Donghyuck, inclusive podría decir que podrías ser tan bueno como yo. — YoonOh rio —Puedes llegar a donde quieras, pero hazlo.

—¡Papá! ¡Tío Hyuckie! ¡El tío Mark me está haciendo volar! —Sungchan gritaba muy feliz.

El niño era cargado por el canadiense y éste simulaba lanzarlo. Ambos se veían lindos que Jung empezó a tomar fotos. Mark se acercó a las gradas y le dio al pequeño a YoonOh.

—Ah, Mark, eres tan bueno con los niños, serás un buen padre. —Jung había lanzado un comentario tan cuidadoso para ver las reacciones de los otros dos, pero solo sintió un poquito de incomodidad al ver las reacciones.

Mark sonrió, él en verdad deseaba poder jugar con un bebé llegando a casa, le daría toda la atención que sus padres no le dieron a él y a su hermana cuando eran niños.

—Tío Hyuckie, juega con nosotros. — pidió el niño.

Los ojos de Mark viajaron al moreno. Llevaban meses sin hablarle, habían prometido ya no contestar llamada o mensajes, ya no eran amigos. Y esa fue la última decisión de Haechan, y Mark la iba a respetar.

—No creo que el tío Mark quiera jugar conmigo —y esas palabras le dieron una idea al moreno. Jugar, el amor siempre fue considerado un juego donde Mark no quería perder ¿Cierto?

—Bueno, no sé si soy yo, pero siento mucha tensión entre ustedes, así que mi hijo y yo iremos por unos bocadillos ¿Quieren algo? —YoonOh quería salir de allí e ir por su esposo.—No, está bien, me voy.

Y cargando al pequeño, Jung huyó con su bebé, Mark no quería hablar con Donghyuck, pero fue el quien tomó la iniciativa.

—Mark, después de tu ensayo ¿Podemos hablar? —cuestionó el moreno.

Mark lo miró y sin darle una respuesta fue a seguir con el show.

Continuará....

Good guy (MarkHyuck)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora