Capítulo 26. La confesión de Sota.
Un joven de cabellos plateados se encontraba recogiendo sus pertenencias con intenciones de retirase del estudio de grabación tras haber finalizado su labor.
Aquel día había sido de lo más normal, con excepción de que Kagome no se encontraba cuando él se levantó, prácticamente había huido al trabajo para evitar darle explicaciones sobre todo lo acontecido la noche anterior. Debido a esto, Inuyasha se encontraba un poco despistado, por lo que no se percató de que cierta muchacha de cabellos oscuros parecía estar esperándolo e la puerta de la salida.
—Hola, Inuyasha. —saludó, sorprendiéndolo.
—¿Kikyo? —dijo al verla. —¿Qué haces aquí? —preguntó.
—Estoy visitando a varias personas —contestó—, a modo de despedida.
—Arreglando todo antes de irte de viaje. —comento al comprenderlo.
Ella asintió. —¿Qué tal te ha ido?
—¡Feh! —él sonrió con demasiado orgullo. —¡Estás viendo el resurgimiento de una estrella en la música! —anunció.
Ella le devolvió la sonrisa.
—Inuyasha, vine a decir adiós. —comentó la chica, después de unos segundos. —Hoy me iré a París.
—Te espera una larga estadía por allá, ¿eh?
Kikyo asintió. Ansiaba bailar en los maravillosos teatros de París, y tal vez eso le ayudaría a despejar sus pensamientos sobre Inuyasha y decidir si lo quería de nuevo a su lado.
—¿Estamos bien? —preguntó la chica, refiriéndose a la situación entre ambos.
—Estamos bien... —respondió Inuyasha, quien finalmente había cerrado página con ella.
-o-
—Felicidades, señorita Higurashi. —dijo uno de los directivos. —Desde ahora ocupará el cargo de jefa del Sector de Moda.
Kagome sonrió mientras los demás aplaudían levemente, todos con excepción de Naraku, quien aún estaba en desacuerdo y miraba a la joven de forma déspota. Sin embargo, esto no le importó a la azabache, quien únicamente ansiaba contarle la noticia a cierto muchacho de cabellos plateados.
Finalizada aquella reunión, la azabache permaneció ocupada mientras trasladaba sus cosas a su nueva oficina y era presentada a su antiguo grupo de trabajo como la nueva encargada del sector.
—¡Felicidades, Higurashi! —dijo uno de sus colegas.
—¡Esto amerita una celebración! —dijo otro.
Kagome no pudo evitar sonreírles y agradecerles con sinceridad, prometiendo realizar una especie de reunión en los próximos días para celebrar lo ocurrido.
—Yo invito. —fue lo último que dijo, haciendo que todos se emocionaran. —¿Alguien ha visto a Sango? —pregunto Kagome.
—Ella pidió permiso por asuntos personales. —comentó uno de los presentes.
Kagome se sorprendió, algo debía haber ocurrido con su amiga, por lo que de inmediato le envió un mensaje, recibiendo como respuesta un: "Lo sabrás muy pronto".
-o-
—¡¿Qué yo haga que?! —preguntó Inuyasha sorprendido. —Sota, lo que me pides es una ridiculez, ¡olvídalo!
—¡Por favor! —rogó un muchacho de cabellos azabaches.
Inuyasha gruñó, hace un momento se encontraba tranquilamente descansando en el departamento de Kagome cuando alguien llamó a la puerta, pensó que sería la familia de la azabache y se sorprendió de ver únicamente al hermano, este le comunicó que su madre y abuelo estaban visitando a Rin y que él había venido a pedirle un favor.
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Eres mi mascota
RomanceKagome Higurashi, es una obstinada pero talentosa periodista que se ve obligada a compartir su departamento con Inuyasha, un muchacho despreocupado de cabellos plateados y ojos dorados. Para deshacerse de él, ella decide ponerle de condición convert...