El Destino de un Reencarnado ~Mushoku Tensei~ (PAUSADO)

Capítulo 35: Noticias.

Muy bien, está decidido. Le haré unos buenos cambios a esta historia cuando termine de escribirla. Si se preguntan el por qué, pues es sencillo. Le di un segundo vistazo y como muchos me habrán ya señalado, hay faltas de coherencia, cosas exageradas como los poderes de los personajes y relaciones forzadas como la de Rinia y Zouku. Encima está lo de Orsted. ¿Desde cuando él cede victorias? 

Si, es vergonzoso para mí ahora que lo veo por segunda vez pero ¡HEY! Es mi primera historia. Soy un novato y de los errores se aprenden. Puede que mientras vaya escribiendo haga cambios, por lo que tal vez encuentren algunas diferencias. No lo haré de inmediato, eso es algo que debo de resaltar, pero mis ganas de hacer de esta una historia buena me carcomen. Bueno, ya no quiero aburrirlos con las decisiones que estoy tomando desde hace tiempo como la de si empezar otra historia o no. Al final dije no pero eso será para otro momento. Sin más que decir, empiecen con su lectura. 

Advertencia; Mushoku Tensei y sus personajes no son de mi propiedad, crédito a sus respectivos creadores. Solo el personaje principal y el rumbo que toma esta historia son de mi propiedad. Me disculpo por errores gramáticos. 

---------------------------------------------------

Primero lo primero, buscar información. No podríamos encontrar a mi padre y su equipo sin saber dónde están, además, un poco de información sobre el Laberinto de Lapan nos vendría de perla y, por supuesto, que mejor lugar que el gremio de aventureros. Solo teníamos que llegar ahí por medio de preguntas.

"Entonces, ¿dónde está el gremio de aventureros?" -preguntó Elinalise un poco confundida-.

"Normalmente en este tipo de ciudades está en el centro de la ciudad al ser los puntos de interés más importante, pero siempre pueden haber excepciones por lo que mejor preguntaremos."

"Mira, tal vez él nos pueda ayudar."

Miré a la dirección que ella señaló y me encontré con un aventurero de la raza feral. Su equipamiento no era tan bueno, pero tampoco tan malo. De por sí estaba en el intermedio, con ropas de cuero que podía defenderte de ataques básicos. Con solo verlo, sabíamos que nos ayudaría con este pequeño problema, así que nos acercamos hacia él para que respondiera nuestras preguntas.

"Hola, señor. ¿Nos podría ayudar con un problemilla?"

El hombre se giró a mi dirección algo confundido y me olfateó. No entendí eso, pero supuse que era común entre los ferales olfatear a un extraño para saber sus intenciones a través de los olores. Para mi suerte, o eso creo, mi olor le terminó siendo muy agradable para este Mirdett (hombre conejo) que acabó por volverse amigable y dirigirme la palabra.

"Entonces, ¿qué necesitas señor?"

"Oh, hablas mi idioma. Eso resuelve un poco nuestros problemas." -dije con una sonrisa-.

"Sí, aprendí ese idioma cuando andaba de aventuras en el Continente Central. Ahora puede decirme que necesita, estoy algo ocupado la verdad."

"No se preocupe, esto será rápido. Solo quería preguntarle dos cosas, sobre el gremio y sobre un hombre que se llama Paul Greyrat."

El hombre conejo se quedó pensativo en el lugar, llevando su mano al mentón mientras miraba al cielo, pareciendo que sus recuerdos se manifestaban allí. Elinalise y yo nos quedamos pacientes ante este hombre, esperando parados por un minuto entero hasta que finalmente pudo extraer la información que requeríamos de su mente.

"Bueno, no oí mucho de ese tal Paul Greyrat, pero sí de su compañero, Geese. Acaban de llegar de su expedición del Laberinto y creo que ese cara de mono se encuentra en el gremio."