Nota: Mushoku Tensei y sus personajes no son de mi propiedad, crédito a sus respectivos creadores. Solo el personaje principal y el rumbo que toma esta historia son de mi propiedad.
Ya pasaron dos días desde el pequeño show sobre el secuestro de Eris. Terminé en un estado deplorable al estar desarmado contra un tipo con experiencia en peleas de vida y muerte y una espada en mano. Al final, fui salvado por la gran Ghislaine quien obtuvo todo el crédito sobre lo acontecido mientras que mi presencia fue completamente erradicada de las noticias al pueblo.
La razón por la que los Boreas decidieron darle todo el crédito a Ghislaine fue para que otras personas supieran con quién se estaban metiendo. Si mencionaran que un simple niño que se convirtió en el tutor de la niña rabiosa del alcalde de Roa fue el verdadero héroe de todo eso, la reputación de esta prestigiosa familia se iría por los suelos.
Actualmente me encuentro en el salón principal, jugando ajedrez con Philip quien no apartaba esa sonrisa elegante de su rostro. La partida se había extendido bastante debido a las asombrosas jugadas del alcalde, pero yo no le permitía infiltrarse en mis filas con tácticas que lo ralentizaban.
"Así que Thomas, ¿eh? Por qué no me sorprende." -comenté con evidente sarcasmo en mi tono de voz-.
"Sí, él era un mayordomo que habíamos contratado hasta lo de hace dos días. Evidentemente él tenía vínculos con la lujuriosa noble familia y lo contrataron para poder tener a Eris. Fue el quien planeó el secuestro únicamente en búsqueda de dinero." -explicó el alcalde los malvados planes de su anterior empleado-.
"Entiendo, pero hay algo que aún me confunde. Ya sé la razón por la que secuestraron a eris, ¿pero por qué yo? Yo soy un simple plebeyo."
"Hay muchas formas de poder utilizar el linaje Greyrat, tanto políticamente, como físicamente... y tú, aunque seas un plebeyo, sigues siendo un Greyrat."
"Y-ya veo." -dije con nerviosismo en mi voz al no imaginarme a qué se refería Philip con lo físico-.
"Bien, ahora que asumo que lo entiendes. Lo de..."
"Sí. Ghislaine llegó y se encargó de todo. Lo sé perfectamente." -interrumpí al alcalde para enfatizar su punto-.
La verdad, yo pensaba que no se necesitaban que difundan las hazañas de Ghislaine sobre este acontecimiento reciente. Ella es una Rey Espada y sus habilidades por lo que sé, sobrepasan por mucho a las de mi padre. Sería más que obvio que su reputación ya esté por las nubes y que muchos le teman con solo su presencia. Philip me había contado que debía de mantenerme oculto de los otros Greyrat. Según lo que me contó, existen cuatro nobles ramas familiares, cada una con el apellido Greyrat en juego. Una de las ramas es en la que me encuentro ahora, Boreas. Las otras tres no sé cuáles son, pero con la que estoy más relacionado vendría siendo Notos al ser mi padre un exmiembro de esa prestigiosa familia. Aún no sé los acontecimientos del pasado de Paul, pero eso no me interesa en lo más mínimo, al menos por el momento. Tarde o temprano me enteraré de las vidas de mis antepasados.
La puerta principal del salón que conectaba con los interminables pasillos de la enorme mansión fue abierta y de ahí una hermosa mujer hizo acto de presencia. Vislumbre como esta con cada paso que daba, esta daba a resaltar sus dotes como miembro de la realeza de los Boreas y la delicadeza que conlleva la elegancia que todo noble debe de demostrar.
La mujer se parecía demasiado a Eris, casi pareciendo un clon de esta. Su cabello tan lizo como la seda caía en forma de cascada por su espalda, siendo más organizado que el de Eris. Sus ojos carmesí hacían combinación con su cabello y cejas y su piel de tez claro era tan lizo como si fuera una muñeca de porcelana. Llevaba un pequeño sombreo de color rojo alrededor de sus ojos y sus labios fueron igualmente más pronunciados con el carmesí que la caracterizaba. Llevaba como prendas un vestido completo igualmente rojo, sin hombros, mostrando más su escultural cuerpo y su delicada piel que haría que muchas mujeres la envidiaran. Sus pechos Copa E eran firmemente sujetos por su vestido que se ajustaba perfectamente a su cuerpo, siendo su enorme escote lo único que mostraba al público. En las mangas empezaban a partir del vestido, siendo la parte superior plegada por una tela más gruesa de color dorado y terminaba en las muñecas con la boca abierta para que el aire se filtraba más fácilmente. La parte superior de su vestido empezaba desde el escote, bajando hasta la cintura con dos tonos diferentes de rojo, siendo por el centro una franja ancha de color carmesí más claro mientras que por los costados era más oscura. De la cintura para abajo, el vestido se abría un poco, alejándose de las piernas de la mujer para no tropezarse con este. Al igual que la parte superior, la zona del centro era de más claro mientras que los lados era más oscuro. Sus tacones de plataforma media de color negro eran ocultos por su vestido y como accesorios llevaba un cintillo negro con bordes dorados en la cabeza actuando como corona y un collar de perlas blancas donde en la parte frontal se encontraba una gema azul con forma de diamante.
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El Destino de un Reencarnado ~Mushoku Tensei~ (PAUSADO)
Aksi¿Qué hubiera pasado sí? Reencarnando en ... Muchas historias en el que el protagonista es reencarnado relatan hechos más allá de la imaginación, pero esas historias son solamente eso, fantasía. ¿O eso parece? Zouku, un empresario que murió en un...