El Destino de un Reencarnado ~Mushoku Tensei~ (PAUSADO)

Capítulo 46: El Rey Dragón Blindado; Perugius Dola.

Si, lo sé, saque este capítulo unos días después. No, no lo tenía listo y nuevamente sí, lo hice de correcaminos. Estaba apurado y ya quería empezar con lo canónico en vez de estar dando vueltas con el relleno y aquí está. El Rey Dragón Blindado, Perugius Dola-sama entra en escena para dar inicio al cuadragésimo sexto capítulo de esta franquicia. Les advierto, esta es solo la introducción de este volumen, por lo que cambios no habrán, al menos no muchos, eso será más adelante. Lo grande se viene en el siguiente Volumen, ya no puedo esperar más. 

Ahora, solo les pido de favor que sigan dejando sus estrellitas y me sigan. Este capítulo tiene más de 10 000 palabras, por lo que largo es. Sin más que decir, pueden empezar.

Advertencia; Mushoku Tensei y sus personajes no son de mi propiedad, crédito a sus respectivos creadores. Solo el personaje principal y el rumbo que esta historia son de mi propiedad. Me disculpo por errores gramáticos y ortográficos.

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Ya era medio día. Salimos temprano porque para llegar a nuestro destino a caballo o a pie, se necesitaría exactamente medio día para llegar partiendo desde la magnífica Ciudad Mágica de Sharia.

Al frente de nosotros, no había más de lo que una vez fue un castillo. Estaba en ruinas, solamente las columnas manteniéndose en el aire sin nada que sujetar para que todo se mantenga en forma. Es como si el techo decidiera romperse en todo el alrededor excepto en donde se encontraban las columnas.

Los restos esparcidos por todo el terreno variaban en tamaño. Desde simple polvo y cenizas que volaron con el viento hasta rocas del tamaño de una carreta. El terreno que abarcaba esto me daba a entender que pudo haber sido una pequeña ciudad, pero no, solo fue un solitario castillo que sirvió como monumento histórico después de destruirse en la antigua guerra que se situó hace casi 500 años.

"El castillo Scotts, una reliquia del pasado de la humanidad cuando todos los humanos se levantaron a pelear contra Laplace. Cuentan algunas historias que todos vinieron aquí con la esperanza de luchar contra los demonios, pero que todo terminó siendo en vano y murieron en combate, otros siendo esclavizados en el proceso."

Explicó la hermosa mujer de cabello dorado trenzado habló conmigo mientras montaba a caballo tras su fiel amiga de cabello blanco, la primera mencionada portando un inusual vestido elegante para viajes como este.

Exactamente, dieron en el clavo. La que me acaba de explicar y aclarar mis dudas sobre lo que vendría siendo un monumento histórico fue sin duda la gran belleza del Asura, Ariel Anemoi Asura.

"..."

Bueno, debía de entender algo. Ni siquiera sabía si esa explicación iba para mí, pero notando el como Sylphie y ella observaron mis cejas levantadas en curiosidad y duda, supuse que la rubia decidió explicarme esto.

Ahora, ¿qué hacían ellos en este viaje? Pues, ni yo lo sé. Este viaje se debía a un encuentro entre Nanahoshi y el Rey de Laputa... digo digo, Chaos Breaker, para transferir su conocimiento sobre los círculos mágicos a él. Yo vendría siendo el perfecto testimonio que le ayudaría a confirmar todas sus investigaciones y encima ayudarle con lo que necesite.

Ahora, volviendo a la realidad, exploré con la vista todo nuestro alrededor con anhelo. Una pradera verde y brillante que era víctima de las refrescantes ventiscas del norte. Toda esa pradera esmeralda rodeó este monumento histórico que pareció deprimente para la vista, pero que no tuvo ninguna oportunidad de salvarse de lo que vendría siendo una de las más grandes guerras que vivió este mundo.

Al frente, adentrándose en las ruinas polvorientas, Nanahoshi observó su alrededor con su máscara pálida siempre presente en su rostro. Era la guía de este viaje, después de todo, ella era la visitante principal quien vendría aquí. Luego estaría yo, su acompañante principal, que en realidad debería de estar viniendo solo, pero por palabras convincentes de la gran Ariel Anemoi Asura, Nanahoshi dejó ir a otros más.