Serendipia

Capitulo 5

Flashback

Veo a mi madre llegar con un vestido en sus manos.

-Mira lo que te traje.-me dice mientras me muestra un vestido.

El vestido es lindo, pero desde ahorita sé que me quedara apretado de alguna parte.

-Pruébatelo, para ver cómo te queda.

-Mamá, no creo que me quede bien.-hago una mueca.

-Vamos, linda, no creo que tu y tu abuela sean de tallas muy diferentes.

- ¡¿Mi abuela?!

-Sí, cariño. Este vestido perteneció a tu abuela Clarisse y antes de ella, a tu bisabuela Ruth.

-Mamá, ese vestido es más viejo que la edad de mi papá y mi tío Erick juntas. Me sorprende que no se haya desintegrado ya- le digo exageradamente.

-No seas dramática.-blanquea los ojos.-Mira lo lindo que es. Anda, ve y pruébatelo.

Sin más remedio, entro a mi closet a cambiarme el vestido que traigo, para ponerme el que me trajo mamá.

-Pero mira lo linda que te ves.-me dice una vez que salgo del closet.

Jalo el vestido hacia abajo, ya que, como lo suponía, me queda apretado del busto.

-Me aprieta del busto, mamá

-Si, yo también lo suponía.-se acerca a mí para colocarme el cinturón de oro que adorna el vestido.-Pero aún así tendrás que usarlo, amor. Es una tradición familiar, que, cuando una miembro de la familia Salvatore se compromete, se ponga este hermoso vestido.

Me miro en el espejo.

Me veo bien.

La verdad me gusta mucho el vestido, es hermoso y sé que, con un buen peinado, el cual le pediré a Adara que me haga, junto con una de mis tiaras, se vera perfecto. El único detalle es lo ajustado que me queda en el pecho.

-¿Tu lo usaste?-la miro a través del espejo.

-Lastimosamente no. Solo es portado por los Salvatore de sangre.-me regala una sonrisa

-Que lastima. Estoy segura de que se te hubiera visto grandioso.-me da un abrazo y planta un tierno beso en mi mejilla.

Fin de Flashback

Mi padre llama la atención de todos al chocar una copa y un cubierto.

-Es un gusto tenerlos a todos ustedes en mi reino y más con la noticia que tenemos que darles mi familia y yo.- hace una pequeña pausa y me mira por unos segundos.- El día de hoy se llevara a cabo la propuesta de compromiso del rey Magnus Lacrontte y mi hija.

La atención de todos se centra en nosotros mientras papá sigue hablando. Pero no presto atención a lo que dice por lo nerviosa que estoy.

En primer lugar,por la propuesta y en segundo lugar, por todas las miradas que siento sobre mí.

De un momento a otro, mi padre deja de hablar y por instinto, volteo a ver a Magnus. El cual, está sobre una de sus rodillas y en sus manos tiene una caja color negro aterciopelada.

Mi corazón late como loco.

Trate de mentalizarme que esto sucedería, pero aun así mi mente queda en blanco cuando me muestra el anillo.