Acorralada

Capitulo 4

Los personajes de Naruto no me pertenecen, yo solo los uso para escribir esta historia sin fines de lucro.

—¿Que sucedido?—cuestionó Yahiko al ver a su esposa llamando a Hinata con el celular en el oído.

—No estoy segura, pero Hina llamó de otro número y me preguntó sobre el paradero de Nagato—Yahiko sintió el peso en su corazón, aún no se hacía a la idea de haber perdido a su mejor amigo—y cuando le dije la verdad, sólo escuché una voz masculina llamándola... estoy segura que se desmayó, seguramente nunca pensó que...—Konan se echó a llorar. A ella también le dolía mucho la muerte de Nagato y lo más triste era saber que el que creían el asesino, vivía junto a Hinata a quien tanto quiso el Uzumaki. Hinata literalmente dormía con el enemigo y ella ni siquiera se lo podía imaginar.

—Maldito Uchiha... seguramente no le dijo nada para evitar las múltiples preguntas que le haría Hinata—abrazo a su esposa en un intento de darse mutuo apoyo—Le juré a mi amigo frente a su tumba, que daría con su asesino y lo haría pagar por su despreciable traicion, el único problema es Hinata... ese mal nacido puede dañarla si ella lo enfrenta y desgraciadamente, sabemos que la Hyuga no se quedara de brazos cruzados—Konan estuvo de acuerdo con el varón. Obito era un desalmado y todas las pruebas que estuvieron investigando con ayuda de sus contactos, lo señalaban como el responsable.

—Con está llamada comprobé que ella en realidad no sabía nada y por lo tanto, creo que es buena idea aceptar la propuesta de los detectives que nos contactaron—tiempo después de la muerte de Nagato, la pareja recibió la visita de dos detectives encargados de investigar a Tobi el enmascarado y les ofrecieron una propuesta bastante controversial. Les pidieron trabajar para ellos como informantes y a cambio, retirarían todos los cargos que pudieran llegar a tener en contra suya, además de la satisfacción de enviar al asesino a prisión por el resto de su vida. Los investigadores de Konoha tenían serias sospechas sobre la verdadera identidad de Tobi y como era de esperarse, ellos sabían que tras la máscara se escondía Obito Uchiha.

—De ser así, deberemos mudarnos a Konoha e iniciar una nueva vida en ese lugar—repuso Yahiko analizando los pros y los contras de tomar esa delicada decisión, puesto que él, no quería al asesino tras las rejas, no, Yahiko quería matarlo con sus propias manos, sin importarle seguir infringiendo la ley.

—Eso es lo que Nagato hubiera querido que hiciéramos... recuerda que Hinata no tiene a nadie y él siempre se tomaba el tiempo de encargarla con nosotros cuando se ausentaba, incluso lo hizo la última vez que lo miramos con vida—la fémina de nuevo se quebró recordando ese día y la última petición del Uzumaki... ¡Cuiden bien a Hinata en mi ausencia!—Se lo debemos a él y no podemos fallarle—no hizo falta decir más, Yahiko también recordó las peticiones que hacia su amigo y se sintió mal por no haberlo hecho desde que les hicieron la propuesta. Konan tenía razón, Hinata en poco tiempo se convirtió el prácticamente el mundo de Nagato.

—Mañana mismo me pondré en contacto con el detective Asuma y le dire que aceptamos trabajar para ellos—Konan lo abrazo y asintió contenta con la decisión que tomaron, después de todo, sin Nagato, ya nada los ataba a ese sitio donde lo único que hacían era recordarlo y culparse por no poder evitar su muerte—Sin embargo, debo advertirte que apenas lo hagamos, ella se pondrá en la mira e intentarán manipularla por medio de las personas a quien quiere, por lo tanto...—Yahiko se sintió mal pero no había otra solución.

—Lo se... debe quedarse completamente sola, incluso las llamadas telefónicas con su primo y con la pareja que la crio. De esa forma, la organización no tendrá con quien manipularla—era cruel, pero Hinata no tenía idea en el mundo en que se había metido y entre menos personas la rodearan era mejor para su propio bienestar.