Prologo

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Los personajes de Naruto, no me pertenecen m yo solo los uso para escribir esta historia sin fines de lucro.

Cuando le propusieron casarse con esa chica descarriada y voluntariosa, no lo pensó por mucho tiempo, después de todo, se trataba de un simple matrimonio por conveniencia. Él por su parte, le ayudaba a su sobrina a incrementar su capital en el ámbito médico, ya que ella era la presidenta de los hospitales pertenecientes a su familia.

Ellos poseían una tercera parte de los hospitales del país y dicho arreglo, los uniría con sus competidores, los cuales eran dueños del cuarenta por ciento. Realizada dicha unión, se posicionarían como los mas grandes y poderosos del país, logrando expandirse al extranjero sin ningún obstáculo. La alianza se iba hacer, con, o sin el matrimonio, pero el padre de la chica, lo pidió como una petición desesperada, fue eso literalmente lo que dijo el estoico empresario.

No conocía a la joven, pero lo que se decía de ella, no le agradaba, ya que de ser cierto, iban a tener muchos problemas debido a su trabajo y la posición que desempeñaba.

Antes de dar una respuesta afirmativa, se dispuso a investigar acerca de lo que realmente sucedía con ella. Siendo el jefe del departamento de narcoticos en la policía, tenía acceso a indagar acerca del perfil de quién quisiera y fue así, como accedió a ella. A pesar de ser muy joven, era realmente bella y quizás podía someterla para que dejara atrás ese comportamiento rebelde y destructivo.

Especializado en el sigilo, se encargó personalmente de seguirla para ver desde lejos todos sus movimientos y lo que descubrió, lo dejo sin palabras. Con sólo un mes de investigación, aceptó el matrimonio. No estaba seguro de si fue por lastima, empatía o quizás porque llegó a sentirse atraído por ella, como no lo había estado anteriormente, pues aún con su edad permanecía soltero.

Conmovido por la chiquilla que aún no lo conocía personalmente, ya que nunca se presentó a las reuniones que realizó su padre y todo era por la supuesta rebeldía, compro una casa y todo lo que pudiera necesitar, pero una semana antes del matrimonio, la chica huyó con otro hombre y no era cualquier hombre.

Furioso y con el orgullo herido, juro vengarse de ella, no le importaba cuando tiempo se llevaría en el proceso, él se vengaría.

[...]

Siendo hija de uno de los empresarios más prominentes del país, Hinata Hyuga, rara vez veía a su padre. Su madre murió cuando ella tenía cuatro años en un accidente automovilístico, donde ambas viajaban y sólo ella salió con vida. A partir de ese trágico día, perdió a su madre y también a su padre, ya que se dedicó a ignorarla.

Su crianza fue en gran parte por Ko y Haru su esposa... la pareja de empleados, la trató como a una hija y ella los quería incluso más que a Hiashi. También estaba Neji, su primo el cual la consentía como a una hermana menor.

Él era diez años mayor que ella y cuando terminó la escuela secundaria, se marchó a los Estados Unidos para continuar con su carrera de médico y después de su partida, sólo lo veía una vez al año.

Con la ausencia de Neji, comenzó a preguntarse si eso había sido obra de su padre, pues los planes de su primo siempre fueron quedarse en Tokio, para terminar su carrera. Ellos planeaban independizarse para que Hinata pudiera ejercer en la medicina, puesto que su padre, no quería que ella se dedicara a eso. Era muy irónico, ya que su madre había sido pediatra.

El tiempo pasó y fue dejando esa hipótesis atrás, sin embargo, cuando cumplió dieciséis años, Hiashi envió a Ko y a Haru lejos de ella, para que se encargarán del mantenimiento de un hospital que adquirió al norte del país y por ende, sumamente alejado.

Siempre se esforzó por llamar su atención, a pesar de sentirse rechazada por él, pero con la dolorosa partida de las personas que fueron más sus padres, todo se derrumbó.

Las semanas siguientes cayó en depresión y se preguntaba porque nadie la quería. Su juventud no le permitió pensar con claridad y creyó erróneamente, que si llamaba la atención de su padre, esté se acercaría a ella y tal vez, sólo tal vez, podía llegar a quererla.

El primer paso, fue meterse en problemas en la escuela, sin embargo, ni con las llamadas de los directores, el varón le daba al menos una reprendida.

El segundo paso, fue fingir que tenía vicios. Dejaba deliberadamente, latas de cerveza y cigarrillos dónde Hiashi los podía ver y de nuevo, falló.

El tercer paso fue su forma de vestir, el castaño rara vez estaba en casa y cuando sabía que lo vería, se colocaba ropa oscura como los emos, pero de nuevo falló.

El cuarto paso fue no llegar a dormir y fingir que se quedaba con hombres, cuando en realidad, se quedaba a dormir en casa de su amiga Shion.

Después del cuarto plan, parecía que había conseguido su cometido, ya que su padre, la llamó a su oficina, para hablar sobre su comportamiento y no simplemente de cosas sin importancia, como lo hacía todos los años que estuvo tratando de obtener su atención.

Con dolor y rencor, comprobó que nada de lo que había hecho funcionó, pues su padre le informó que ya no podía más con su rebeldía.

Como era de esperarse,  Hiashi no quiso lidiar con el "problema"y encontró la manera perfecta para deshacerse de ella de una vez por todas. Sin remordimiento, le dijo que en un mes contraería matrimonio, con un hombre inflexible que la pondría en su sitio.

Harta de todo, se reveló contra él y le gritó como nunca antes lo había hecho, después de todo, ya no le importaba agradarle y menos ahora que tenía a alguien que si la quería . Durante sus salidas nocturnas en la soledad del parque cercano a su casa, encontró a su verdadero amor y le pidió fugarse con él.

Hiashi la abofeteó por primera vez en su vida y le aseguró que quisiera o no, se casaría. Hinata reflexionó y aceptó, sólo para huir unos días antes de la boda, dejando a su padre con la vergüenza. Ese último acto, fue su venganza por todos los años de desamor y por apartarla de quienes la querían.

[...]

Durante dos años, Hinata vivió como en un cuento de hadas. Luego de huir, la pareja se caso y se mudaron a una cuidad lejana de todos los que los conocían, pero nada es para siempre y su falsa felicidad, se hizo añicos cuando los parientes de su esposo lo llamaron para que se unieran al negocio con ellos.

Se mudaron y aunque vivían mucho mejor económicamente, algo entre ellos comenzó a quebrarse lentamente y sabía que los los cristales desintegrados, no se podían unir jamás.

Aún rodeada de personas, se sentía más sola que cuando vivía con su padre y el peso de las malas decisiones, le quemaban el cerebro.

Continuara.

Bueno, como ven, no me pude detener en subir el prólogo de esta nueva historia. Se que primero estaba la de Shisuhina, pero le faltan algunos ajustes y está la tenía primero. No estaré actualizando hasta que termine Dolorosas verdades, pero ya publicada me esfuerzo por hacerlo más rápido. Me disculpo por las faltas de ortografía y cuando las encontré, las corregiré.

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